El 90% del caviar de Riofrío está agotado desde el mes de octubre
La piscifactoría Sierra Nevada, situada en Riofrío (Granada), dedicada a la cría y explotación de truchas y esturiones, tiene casi agotadas sus existencias de caviar desde principios de octubre, según el director comercial adjunto de la empresa, David Montalbán. Estos pedidos corresponden a grandes clientes, fundamentalmente a tiendas.
Montalbán añadió que la piscifactoría prevé vender este mes, entre clientes individuales y "rezagados", el 10% restante de las existencias de caviar, procedente de "esturiones que nos van dando huevas sueltas estos días". El directivo indicó que en estos días es cuando se produce el mejor caviar, el que la empresa comercializa como Exelcius y que suele ser el más demandado por consumidores particulares.
En los últimos tiempos, se ha incrementado el número de clientes que prefieren acercarse a la piscifactoría para adquirir el caviar y, de paso, ver el proceso que se sigue hasta su envasado "en lugar de ir a un supermercado y comprarlo directamente allí", explicó. Montalbán atribuyó el aumento "espectacular" de las ventas de caviar de la piscifactoría granadina, que supera este año el 50%, al hecho de que "la gente comienza a conocernos y ve que el caviar que vendemos es igual o mejor que el de fuera".
Pedidos diseminados
Aunque los pedidos se diseminan por toda la geografía española, las ventas de este ejercicio se han centrado mucho en Madrid, Barcelona y el Levante. El caviar Exelcius de la piscifactoría granadina ganó hace varias semanas una cata internacional, en la que el producto competía con tres marcas de caviar iraníes, las de mayor prestigio en España. "Nos ha ayudado mucho y ha hecho que, desde entonces, estemos desbordados", indicó el director comercial de la firma.
Montalbán insistió en que la calidad del caviar de Riofrío "no tiene por qué ser inferior". Entre los elementos competitivos del producto comercializado por la piscifactoría granadina, destacó la rapidez con que llega al cliente en comparación con el procedente del extranjero, que puede tardar varios meses en entregarse en su destino, y el comercializarse a un precio más barato que el caviar iraní o ruso, aunque las variedades de más calidad pueden igualar el precio del iraní.
Otro de los elementos diferenciadores de la piscifactoría granadina es la consideración de su caviar como "producto ecológico", una distinción cada vez más valorada por los consumidores. El caviar Exelcius, ganador de la cata y equivalente al triple cero iraní, se comercializa a un precio de 3.300 euros el kilo (193 euros el bote de 60 gramos). El más exquisito de todos es el caviar Unico, del que sólo se han producido entre 12 y 14 kilogramos este año, cuyo precio de venta al público es de 5.400 euros el kilo (321 euros en su formato de 60 gramos). El más estándar, llamado Clásico, se vende a 1.700 euros el kilo.
