Ronaldo se cae en el peor momento

"Ronaldo, ahora, tiene muy buena cara, está feliz", informó Vanderlei Luxemburgo ventilando desde las profundidades del vestuario la noticia de la milagrosa recuperación del brasileño. El Madrid acababa de golear al Atlético y Ronaldo, en el último minuto, había chocado contra Perea fracturándose así el tobillo izquierdo. Pero áun no lo sabía. Pensaba que sufría un leve esguince. Ayer, el delantero, con un gorro de lana y vestido de oscuro, recogió en la clínica Ruber Internacional el diagnóstico de su lesión más grave desde que en 2002 llegó a la capital: rotura parcial del ligamento tibio peroné anterior del tobillo izquierdo. Una larga sucesión de palabras que significa que el futbolista no volverá a jugar, según las estimaciones de los médicos, hasta dentro de un mes. Además, Míchel Salgado estará 10 días de baja por una rotura en el bíceps del muslo izquierdo.

Ronaldo, en su convalecencia,se perderá, si se cumplen las profecías de los doctores, cuatro partidos de Liga (Valencia, Betis, Zaragoza y Deportivo) y dos de Liga de Campeones (ambos contra el Rosenborg). Acorde con las cábalas, regresará con el tiempo justo para unirse a la concentración previa al clásico contra el Barcelona, el próximo 20 de noviembre. El jugador estará 15 días sin poder apoyar el pie izquierdo y después necesitará, al menos, otras dos semanas para recuperarse totalmente.

No es una baja cualquiera. Ronaldo, que se produjo la fractura en un choque fortuito contra Perea en la última jugada del derby, lleva siete goles en la Liga. A gol por partido. Un tanto cada 86 minutos. Desde que llegó al Madrid, su equipo tiene severas dificultades para vencer sin él en el césped. Así, los blancos sólo ganan un tercio de sus encuentros sin el recurso de su único delantero puro en nómina. Con él la cifra asciende a cerca del 60% de victorias.

Owen no era necesario y se marchó a principios de temporada al Newcastle. Portillo era prescindible y está cedido en el Brujas belga, para "coger minutos". Era aconsejable traspasar a Morientes y el pasado invierno, tras haber sido repescado del Mónaco, se marchó al Liverpool. Ahora, para sustituir a Ronaldo, a Luxemburgo sólo le queda la opción de reubicar como hombres más adelantados a Raúl o a Baptista. También ascender a la primera línea de vanguardia al chaval de la cantera Roberto Soldado. No tiene más opciones.

Pero la gráfica de la dependencia que liga al Madrid con la eficacia de Ronaldo tiene más trazos: de los 53 encuentros ligueros en los que el brasileño ha conseguido marcar, el Madrid ha ganado 48. Sin embargo, cuando no está en el césped o no se encuentra inspirado, los porcentajes de victoria blanca descienden bruscamente. Por ejemplo, cuando no ha marcado, en 51 ocasiones, el Madrid ha caído 14 veces. Una estadística que no sólo se activa en la Liga. Ronaldo aún no ha debutado en la Liga de Campeones y su equipo ha perdido un partido (4-0 en Lyón ante el Olympique) y ha ganado el otro (2-1 al Olympiakos, con gol de Soldado).