Igualdad es humanidad

A pesar de la persecución y marginación padecidas, la realidad de la homosexualidad se ha ido abriendo paso y la sociedad ha ido asimilando y aceptando esa nueva situación de manera silenciosa, mientras los poderes públicos y los gobiernos han ido más rezagados, e incluso en algunos casos han sido patrocinadores de la discriminación y la homofobia. Éstas son algunas de las conclusiones en que coinciden tres libros que analizan la historia de los homosexuales en España y su situación actual. Los tres son complementarios y forman un mapa histórico, social, psicológico y cultural de estas personas, de la homosexualidad y, sobre todo, de su representación y manifestación. Van más allá del estereotipo y muestran la lucha para que sean considerados y respetados como unas personas y ciudadanos más, con sus mismos deberes y derechos.

Ese primer acercamiento lo hace el profesor Alberto Mira en De Sodoma a Chueca. Una historia de la homosexualidad en España en el siglo XX en el cual rescata esa historia particular insertada en la general del país. Lo hace a través de las diferentes y diversas manifestaciones culturales de ideas y conceptos surgidas en torno a la homosexualidad. Una estructura que hace interesante estas páginas y que enriquece un debate sobre el que últimamente se han escuchado toda clase de desatinos y desempolvado estudios obsoletos. Mira, que en 1999 ya escribió el diccionario Para entendernos, empieza este fresco con un capítulo que sirve para enmarcar todo lo que ha de venir, hace un acercamiento histórico, jurídico y filosófico sobre el homosexual y la homosexualidad a principios del siglo pasado. A partir de ahí el libro avanza en aspectos como la aparición del modelo homófilo, el tratamiento que recibieron durante el franquismo, la experiencia de la transición y termina en el presente. Una evolución que se muestra a través de las creaciones y opiniones de escritores, cineastas, músicos, filósofos o actores, para enriquecer un tema planteado desde la tensión creada entre el estereotipo y la individualidad.

Si el libro de Mira atraviesa el siglo XX y permite apreciar el proceso de la homosexualidad en la sociedad y la historia, el de Manuel Ángel Soriano Gil se detiene en un episodio concreto bajo el título La marginación homosexual en la España de la Transición. Soriano, psicólogo y también autor de Homosexualidad y represión, empieza su análisis exponiendo el tema desde las ciencias humanas y clínicas y sigue con el antropológico y religioso para adentrarse en la realidad vivida con la llegada de la democracia. Y una vez más muestra que la vida real se incorpora a la convivencia y deja claro que los políticos y los gobiernos en sus variados niveles poco hicieron por la asignación de unos derechos y pasar por encima de prejuicios. Porque no se trata de una lucha por la liberación homosexual sino del reconocimiento y la defensa de la libertad y la igualdad en una sociedad democrática.

Una mirada a esa recriminación y castigo de que han sido víctimas una parte de la sociedad la hace Javier Ugarte Pérez en Sin derramamiento de sangre. Experto en Michel Foucault y fundador de la revista Orientaciones. Revista de Homosexualidad, Ugarte reflexiona sobre el origen de esa discriminación, pero no como un caso aislado sino que responde a ciertos comportamientos de la sociedad frente a determinados grupos o poblaciones. Y se olvidan así de la libertad, la igualdad y el respeto. Tres de los pilares de las sociedades modernas que no se aplican como se predica, según demuestran estos libros en los que dejan en evidencia, también, la hipocresía y la intolerancia.