Sadam es interrogado sobre una matanza de chiíes en 1982
El ex dictador iraquí aparece en un vídeo ante el tribunal que lo juzgará
El tribunal especial iraquí que deberá juzgar a Sadam Husein divulgó ayer un vídeo en el que el juez Raad Juhi interroga al ex dictador sobre la matanza de 160 hombres en Dujail, aldea chií al norte de Bagdad, ocurrida en 1982. Fue una acción de castigo tras un intento de asesinato de Sadam llevado a cabo al parecer por el partido islamista Dawa, antes clandestino y ahora en el poder como parte de la coalición chií-kurda.
En el vídeo se puede ver al ex presidente vestido con chaqueta oscura y camisa blanca abierta y sin corbata. Es la segunda vez que comparece ante un tribunal desde su captura en diciembre de 2003. La emisión del vídeo -que al parecer se obtuvo el domingo, aunque el abogado defensor, Giovanni di Stefano, lo sitúa en julio, fecha de su primera comparecencia- se produce 48 horas después de que el equipo principal de abogados de Sadam Husein basado en Jordania alegara indefensión, al no estar al corriente de los cargos que pesan sobre su cliente ni haber recibido un papel de los seis millones de documentos de los que al parecer consta el sumario. Pero también llega días después de que el presidente transitorio, Yalal Talabani, asegurara que el juicio oral contra el ex dictador podría comenzar en dos meses.
La matanza de Dujail será el primero de los 12 casos que juzgará el tribunal y en él están acusados otros ex altos cargos del régimen. Aunque se trata de un crimen menor, en comparación con otros cargos (genocidio, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra, desaparición de decenas de miles de personas), los juristas creen que será la piedra de toque de todo el proceso.
Pese al optimismo de Talabani, los abogados de Sadam Husein creen que será muy difícil, por razones técnicas, comenzar el juicio antes de fin de año, como pretende el Gobierno transitorio. El caso de Dujail es el más sencillo de todos y podría servir para poner en marcha una maquinaria judicial que probablemente acabará con la máxima pena. Ése es, al menos, el deseo del actual primer ministro, Ibrahim al Yafari, líder precisamente del partido Dawa.
Por otra parte, ayer resultaron muertos cuatro policías iraquíes al ser tiroteados por desconocidos en un control militar al norte de Bagdad.
