El Parlamento foral aprueba las cuentas de Navarra sin concesiones a la oposición
El Parlamento navarro aprobó ayer con los votos de UPN y CDN los Presupuestos de la comunidad foral para 2005 sin hacer concesión alguna a los grupos de la oposición, a los que, en palabras de un parlamentario de izquierda, no les tocó "ni la pedrea". La mayoría absoluta que suman regionalistas y convergentes les permitió sacar adelante unas cuentas que suman 3.154 millones de euros, tachadas por toda la oposición como conservadoras y "lesivas" para los intereses públicos y la sociedad.
UPN (23 escaños) y CDN (4) impusieron su mayoría en una Cámara de 50 miembros derrotando sistemáticamente las iniciativas de los demás grupos. El Gobierno foral sólo ha aceptado diez de las 1.200 enmiendas presentadas a unas cuentas que, según ha reiterado el vicepresidente del Ejecutivo y consejero de Economía, Francisco Iribarren, mantendrán a Navarra a la cabeza del bienestar social español, del crecimiento (se prevé un 3,4% para 2005), y de la inversión industrial y en infraestructuras.
La "apisonadora" gubernamental, en palabras del secretario general del PSN, Carlos Chivite, se ha traducido en que apenas un 0,06% del proyecto ha sido modificado por indicación de los partidos de oposición. Regionalistas y convergentes introdujeron enmiendas a su propio texto por valor de 19 millones.
Socialistas, IU, Aralar, EA y el PNV reprocharon ayer al Ejecutivo de Sanz la aprobación de un presupuesto que beneficiará a las clases más pudientes en materia fiscal mientras recorta gastos imprescindibles en bienestar social, cultura, sanidad, educación o medio ambiente, entre otras áreas. La reducción de las partidas para la Universidad pública, cuantías insuficientes para la financiación municipal o los recortes a la promoción del euskera centraron algunas de las críticas. "Lo que ocurre en esta Cámara es que ustedes han perdido la capacidad de bloqueo de las cuentas que tuvieron en la anterior legislatura y no lo asumen", les replicó el portavoz de UPN, Carlos García Adanero.
