_
_
_
_
_

Canal de Historia indaga en el mito del rey Arturo y la corte de Camelot

La cadena de Digital + emite hoy un especial sobre las gestas del caballero

¿Existieron realmente el rey Arturo y los caballeros de la Mesa Redonda? ¿Cuáles fueron los orígenes del mito? ¿Fue Camelot sólo un reino imaginario? Canal de Historia (Digital +, dial 65) propone hoy (a las 17.00 y a las 23.00) un viaje de dos horas a través del tiempo para ofrecer La leyenda del Rey Arturo, un documental que pretende desvelar cuánto hay de verdad, de imaginación y de fábula en la vida y en la obra del caudillo que unificó Britania.

En plena alta Edad Media, en una época de convulsas inmigraciones y brutales guerras tribales, nació una leyenda, un relato de héroes, la historia de un poderoso rey, su fraternidad de nobles caballeros y su cruzada para construir un mundo perfecto. Durante milenios, los poetas han cantado al caudillo que unificó Britania, fundó el reino de Camelot y donde los caballeros de la Mesa Redonda encarnaron los grandes ideales de la caballería dispuestos a sacrificar su vida por honor, amor y por su país. A lo largo de los siglos, las aventuras del rey Arturo y su fabulosa corte de héroes han inundado la imaginación del mundo occidental e inspirado a incontables visionarios y escritores.

Pero ¿cuáles fueron los orígenes de la leyenda? ¿Existió realmente un rey británico llamado Arturo al que poder atribuirle tales proezas? Canal de Historia se adentra en el documental La leyenda del Rey Arturo (17.00 y 23.00) en las corrientes de ficción y realidad del Arturo literario e intenta descubrir qué hay de verdad en personajes íntimamente ligados a su existencia. El gran desafío de este especial es contar el misterio de uno de las celebridades más escurridizas, una fábula que abarca siglos y desafía al tiempo a través del testimonio de prestigiosos historiadores y expertos como Bryan Walters (Asociación de Arqueología Romana), Christopher Snyder (Universidad de Marymount), Scott Lloyd (autor de Pendragon, the origins of Arthur), Bonnie Wheeler (Estudios Artúricos) o Geoffrey Ashe (Comité de investigación de Camelot). Su opinión es unánime: no existió nadie con el nombre de Arturo; no hay ningún texto histórico que lo mencione. Su enigmática figura se fue forjando a partir de las leyendas transmitidas por una nebulosa tradición oral que cantaba las hazañas de un caudillo britano y sus compañeros de correrías.

El origen de la leyenda

Una de las búsquedas se remonta a 1485, cuando la obra póstuma de sir Thomas Malory, La muerte de Arturo, transformó al caballero en un personaje literario de primer orden. Su tratado habla de una Britania dividida, en plena guerra civil, con grupos de señores feudales reclamando la corona. Sería rey quien superara una prueba mágica: arrancar la espada (Excalibur) de un yunque apoyado en una piedra. Tan sólo Arturo, concebido en adulterio por su padre, el rey Uther Pendragon, y entregado a la protección del mago Merlín, fue capaz de sacar la espada. Malory, que adaptó y reordenó anteriores obras con los hombres, mujeres y sucesos principales asociados a la leyenda, cuenta cómo Arturo estableció la importante corte de Camelot, se desposó con Ginebra y con su dote mandó construir una gran mesa redonda donde sentó a los grandes héroes: sir Percival, sir Gallahad... y sobre todo Lancelot del Lago, que encarnaba el paradigma del caballero leal siempre luchando a favor de los desvalidos. "Un superhéroe de cómic de la era de la caballería", tal como se le define en el documental.

Descubrir la verdad oculta en la leyenda requiere indagar en el tiempo y en la propia historia de pueblo britano, que sufrió a lo largo de los siglos sucesivas invasiones de los romanos, los sajones o los normandos.

El documental también revela cómo el rey Arturo pudo tener un antecedente histórico como comandante o capitán de un desconocido reino britano, tal como narra Godofredo de Monmouth en su Historia real de Britania. Según este clérigo de origen incierto, de quien lo único que se sabe es que dio clases en Oxford entre 1129 y 1151, a principios del siglo V, Britania, liberada del Imperio Romano, cae en poder de Vortigern, un monarca sin escrúpulos que permitió la entrada de los bárbaros. Los britanos necesitaban un líder invencible que los llevara a conquistar los territorios ocupados. Y lo encontraron, pero el singular guerrero tampoco se llamaba Arturo.

Para los investigadores, la auténtica crónica de Arturo es la propia crónica de Britania, pero no es la gesta de un solo hombre ni de un solo periodo histórico. "El verdadero Arturo sigue siendo una invención, es una de las grandes novelas jamás escritas", concluye el especial.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_