El Gobierno se muestra dispuesto a empezar por su cuenta la 'Y' desde Irún

Al Gobierno vasco no le ha sentado nada bien que el Ministerio de Fomento se haya decantado por comenzar las obras de la Y vasca ferroviaria en el tramo Vitoria-Bilbao, de 70 kilómetros. El consejero de Transportes, Álvaro Amann, considera que esta decisión no es coherente con el carácter transeuropeo de esta infraestructura, por lo que anunció su intención de empezar este mismo año a construir por su cuenta la red de velocidad alta por Irún, si Fomento no lo hace. Con esta amenaza acudirá Amann a la entrevista con la ministra Magdalena Álvarez, el día 30.

La llegada de los socialistas al Gobierno no ha hecho desaparecer las disputas que han mantenido Fomento y la consejería de Transportes en torno al proyecto ferroviario de la Y vasca, la línea que conectará las tres capitales vascas en velocidad alta. La competencia para construir esta infraestructura, cuyo coste se estima en más de 3.000 millones de euros, corresponde al Gobierno central. El último episodio de esta secuencia de desavenencias tiene su origen en la decisión de la ministra de paralizar la licitación de tramos desconexos que hizo su antecesor y sacar a concurso en cambio todo el eje Vitoria-Bilbao, que comenzará a construirse el próximo año. Amann expresó ayer su disconformidad con este planteamiento e insistió en que, "por coherencia", la Y vasca debe comenzar a construirse desde Irún, por tratarse de "una red de carácter transeuropeo".

La apuesta por comenzar con el tramo entre Vitoria y Bilbao, como pretende Fomento para facilitar su conexión con la línea del AVE en construcción entre Madrid, Valladolid y Burgos, supone "desnaturalizar" la red vasca de alta velocidad, en opinión del consejero, quien insistió en que "lo consecuente y lo coherente es empezar por Irún, como va a hacer el Gobierno vasco".

Según el planteamiento de Amann, la línea de alta velocidad terminaría en la frontera con Francia, dado que el país vecino todavía no tiene siquiera proyectada su red rápida entre Burdeos-Dax-Hendaya. Los últimos plazos manejados sitúan la conexión en la frontera a partir de 2015. Sin embargo, Amann se aferró ayer a la necesidad de dar prioridad al tramo guipuzcoano de la Y vasca con la finalidad de tener lista la conexión entre París y San Sebastián en el año 2007.

Con todo, el consejero afirmó que mantiene su disposición a poner este mismo año a trabajar a las máquinas en la parte guipuzcoana. "Si Madrid nos deja solos, lo haremos solos, porque los cimientos de la obra está en Irún". Amann justificó esta decisión, entre otras razones, por la urgencia de dar solución a los problemas que genera el elevado tránsito de mercancías -unos 9.000 camiones diarios, que transportan 50.000 toneladas- por el paso fronterizo de Biriatou. El Ejecutivo autonómico ya tiene encargados los proyectos constructivos de cuatro tramos en Guipúzcoa, en los que lleva invertidos 3,8 millones de euros.

La Diputación de Guipúzcoa denunció ayer el "sesgo partidista" que supone "marginar" el tramo guipuzcoano. En una nota, el diputado general, Joxe Joan González de Txabarri, aseguró que la decisión de Fomento "no se corresponde con un planteamiento europeísta y de progreso".

Amann volvió a ofrecer a Fomento todos los trabajos realizados hasta ahora y apeló a recuperar la colaboración institucional "sin intermediarios". Se refiría así, de forma crítica, a la entrevista del jueves entre Álvarez y el líder de los socialistas vascos, Patxi López, en la que la ministra anunció el desarrollo de la Y vasca. "La relación entre dos gobiernos no necesita de intermediarios porque, lejos de acercar distancias, alejan. Se ha elegido el peor método", censuró.

Ante la próxima cita con la ministra, prevista para el próximo 30 de junio, el consejero hizo un llamamiento a "empezar a trabajar juntos y unir esfuerzos para que las cosas se hagan bien". También anunció que en esta reunión propondrá la creación de una comisión de seguimiento y solicitará a Álvarez que se retomen las tres comisiones paritarias que estudian los accesos de la red de alta velocidad en las tres capitales.

El parlamentario del PP Gonzalo Machín también terció en este asunto y afirmó ayer que los socialistas "se unen ahora a los partidos que quieren retrasar" esta infraestructura y criticó que el nuevo Gobierno haya "paralizado" los contratos de adjudicación que el PP puso en marcha durante su mandato. Por su parte, el portavoz de la Presidencia de EB-IU, Mikel Arana, dijo que Fomento no podrá licitar el tramo Vitoria-Bilbao porque aún no se ha iniciado la evaluación de impacto ambiental de este trayecto.

[Fomento ha decidido suspender el proceso de expropiación de terrenos en el aeropuerto de Hondarribia para ampliar de la plataforma de estacionamiento de aeronaves, iniciado en 2002, debido a que esta actuación se retrasa a 2008].