Millares de camiones esperan en Francia para entrar en España
La prohibición del paso de camiones por el País Vasco provocó ayer una situación crítica en las autopistas francesas A-63 y A-10, que conducen a España y constituyen el principal eje de comunicaciones del suroeste francés.
Entre 1.200 y 1.500 camiones quedaron bloqueados desde primeras horas en los 11 kilómetros de la A-63 anteriores al puesto fronterizo de Biriatou y varios centenares más se embotellaron en un tramo de otros 8-9 kilómetros más al norte, donde la Gendarmería les mandó detenerse para que no siguieran acumulándose ante una frontera impracticable.
Con el paso de las horas, las autoridades extendieron el área de crisis a toda la autopista A-10 hasta las cercanías de Poitiers. Los que circulaban cerca de Burdeos fueron obligados a pararse en el Parque de Exposiciones y otros recibieron instrucciones de estacionar en las áreas de servicio a lo largo del recorrido. La única manera de escapar al bloqueo era dirigirse hacia Cataluña para tratar de pasar la frontera por Le Perthus.
La Cruz Roja y dotaciones de bomberos fueron movilizadas para llevar comida y bebidas calientes a los chóferes atrapados. Una célula de crisis, emplazada en la prefectura del departamento de los Pirineos Atlánticos, organizaba anoche la evacuación de los afectados, con la previsión de que el problema persista durante todo el fin de semana.
Los 400 kilómetros que separan Poitiers del País Vasco-francés permanecieron abiertos a la circulación de vehículos ligeros hasta San Juan de Luz, donde se les obligaba a salir de la autopista.
Por la tarde, los vehículos ligeros fueron obligados a salir más al norte, en Las Landas. En el resto de las regiones del oeste, todas afectadas por la nevada, Francia prohibió circular a los camiones en zonas de Bretaña.
