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¿Inseguridad sexual?

El pasado 7 de diciembre Luisa Etxenike, en su artículo Inseguridad sexual, hacía referencia al informe y a la campaña sobre las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) presentados recientemente por el consejero de Sanidad. Dentro del panorama que dibujaba, creo que faltan algunos datos que pueden ayudar a una mejor comprensión de la situación. En primer lugar, indicar que el aumento de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) no es un fenómeno exclusivo de Euskadi, ni siquiera del Estado español, sino que es un proceso que se está dando en todo el mundo occidental desde hace 3-4 años. Su causa es perfectamente conocida: gracias a los medicamentos antirretrovirales, el sida ha dejado de ser una enfermedad mortal y ello ha traido consigo una relajación de las medidas preventivas sexuales. Por eso en ningún momento el consejero de Sanidad ha afirmado que "la culpa es de los jóvenes que no se enteran".

Todavía estamos a tiempo de evitar que los jóvenes se vean afectados por las enfermedades de transmisión sexual

En segundo lugar, quiero señalar que todavía -y afortunadamente- las ETS no están afectando a los más jóvenes ni a los adolescentes. Es decir, todavía estamos a tiempo de evitar que se infecten. Por ello, es importante transmitir a los chicos y chicas la idea de que van a iniciar sus relaciones sexuales en un mundo en que se está produciendo un repunte de estas infecciones. Y para eso es vital que conozcan cuáles son, cómo se transmiten y cómo se previenen.

En tercer lugar, destacar que las campañas en los medios de comunicación que realiza el Departamento de Sanidad no son intervenciones puntuales. No son mas que una parte, la más visible, de las acciones que se realizan para prevenir tanto las ETS como la infección por el VIH que, en el momento actual, se ha convertido casi exclusivamente en una infección de transmisión sexual.

Así, por ejemplo, desde hace 15 años, los Departamentos de Sanidad y Educación ofertan material de prevención de sida -manuales para el profesor, para el alumno, vídeos, preservativos...- a todos los centros escolares de Euskadi. Por otra parte, la colaboración con los colegios de Farmacéuticos y ONGs ha traido consigo la puesta en marcha de programas dirigidos a jóvenes y adolescentes como el de "3 preservativos a 200 pesetas" que se realizó en 1995 y se ha repetido en 2000. Las consecuencias de estas acciones son inegables. La infección por el VIH ha retrocedido a lo largo de estos años.

En cuarto lugar, indicar que los preservativos se pueden conseguir en la actualidad en farmacias -incluyendo las máquinas que hay en el exterior de muchas de ellas, como usted misma reconoce-, en centros comerciales, donde acuden con frecuencia los y las adolescentes, grandes superficies, supermercados, cafeterías y salas de fiestas. Creo que, hoy en día, la cobertura de distribución existente es razonablemente buena.

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Finalmente, la campaña no gira en torno a un mensaje de ciencia-ficción. El preservativo femenino de poliuretano existe y está comercializado en nuestro país. Se puede adquirir en las farmacias. Es verdad que todavía es poco conocido y lo que no se conoce no se utiliza. También es cierto en que hoy por hoy no puede competir ni en precio ni en comodidad de utilización con el preservativo masculino. Pero, a medio plazo, el preservativo femenino -más perfeccionado que el actual- y los microbicidas vaginales (sustancias que aplicadas intravaginalmente antes de la relación sexual matan a los microbios) se van a convertir en algunas de las armas más eficaces contra la diseminación de las ETS y del VIH. Por ello, es necesario que las chicas y los chicos sepan que el preservativo femenino existe y que da a la mujer la posibilidad de adoptar medidas preventivas independientemente de la voluntad de su pareja.

No podemos ser triunfalistas en campos tan complejos como el de la sexualidad y los problemas de salud de ella derivados, pero es inegable que en estos últimos 15 años se ha avanzado mucho. En todo caso, hablar de culpables, fracasos, campañas fallidas y despropósitos no es más que una manera muy parcial y subjetiva de describir la realidad.

Daniel Zulaika es coordinador del Plan del Sida de Osakidetza y presidente de Seisida.

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