Florentino Pérez quiere convertir la nueva ACS en la primera constructora europea
El presidente de ACS, Florentino Pérez, anunció ayer que la nueva compañía resultado de la fusión con Dragados pretende erigirse como la primera constructora europea, desde el tercer puesto que ocupa en la actualidad. Florentino Pérez, que participó ayer en un encuentro organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), se pronunció también sobre la posible existencia de una burbuja en el sector inmobiliario por el fuerte incremento de los precios en los últimos años: "Ahora se construye un número excesivo de viviendas y tendrá que disminuir. Cuando disminuya la demanda habrá menor presión en los precios. No somos partidarios del negocio inmobiliario porque se trata de una cultura distinta, aunque estamos satisfechos de nuestra participación del 20% en Urbis".
Respecto a la marcha del sector constructor, el presidente de ACS considera que va a ser bueno hasta 2007 por el plan de infraestructuras existente. Además, explicó que para mantener unas infraestructuras de calidad es necesario invertir al menos el 5% del producto interior bruto (PIB), por lo que la actividad está garantizada. En este sentido se mostró partidario del ajuste presupuestario impulsado por el Gobierno, "ya que el dinero que antes se iba a pagar intereses de la deuda ahora podrá invertirse en infraestructuras, que son mucho más productivas".
Nuevos mercados
El presidente de ACS se mostró contrario a desarrollar la actividad constructora en otros países ya que consideró esta práctica de "alto riesgo". Eso explica que, tras adquirir Dragados, vendiera la firma holandesa HBG, "cuya gestión era muy difícil". Y añadió: "Queremos hacer negocios de contratista y sólo construir aquellas concesiones que ganemos en concursos. Va a haber importantes oportunidades de inversión en Europa del Este por los fondos comunitarios que recibirán estos países y acudiremos a estos mercados, pero siempre que ganemos una concesión".
Sobre la marcha de la compañía, el también presidente del Real Madrid se ha marcado como objetivo aumentar la facturación de ACS entre el 10% y el 15% anual, mientras que el beneficio debería crecer entre el 15% y el 20%. "Tenemos 100.000 empleados, ganaremos este año 400 millones de euros con una facturación de 10.800 millones, unos recursos propios de 2.000 millones y un endeudamiento neto de 1.500 millones".
Por último, apuntó también su deseo de aumentar su participación en la nueva ACS, que actualmente es del 4,9% del capital, y dijo sentirse satisfecho con los porcentajes de la constructora en Abertis (12%), Xfera (20%) y Urbis (20%).
