Onda Jerez, un suculento objeto de deseo

Onda Jerez Televisión nace un 2 de mayo de 1989. Tras unos comienzos difíciles -el proyecto no cumplía con todos los requisitos legales y la sede tuvo que cambiar varias veces de ubicación para eludir su cierre- lo que surgió como una arriesgada aventura fue calando en la sociedad jerezana. Al día de hoy, esta televisión municipal ha logrado convertirse en líder de las emisoras locales del país y, al mismo tiempo, en uno de los más crudos escenarios de intrigas políticas que se conocen en Andalucía.

Con una plantilla que ronda los 70 profesionales y un presupuesto que esta temporada asciende a casi tres millones de euros, Onda Jerez ha sido, en el mandato que ahora toca a su fin, el objeto más deseado del patrimonio que posee el Ayuntamiento de Jerez. El alcalde, Pedro Pacheco (PSA), vio cómo, por primera vez, la oposición le arrebataba el control de su televisión. Fue el precio más alto que tuvo que pagar al romper el pacto que mantenía con Izquierda Unida y quedarse en minoría en la Corporación, escenario que aprovecharon los grupos de la oposición (PP, PSOE e IU) para modificar los estatutos de Jecomusa, la empresa que gestiona los medios de comunicación municipales, y colocar en la presidencia de la entidad por espacio de algo menos de tres meses a la concejal del PP Felisa Rosado.

"Instrumento político"

Los rivales políticos del regidor jerezano no lograron imponer los cambios que pretendían en una televisión que siempre han definido como "un instrumento político al servicio de Pedro Pacheco". Sus intenciones de abrir la programación a debates con participación de todos los grupos y emitir en directo los plenos del Consistorio jerezano chocaron con un complicado entramado jurídico orquestado por el equipo de gobierno.

Pacheco y los suyos retomaron el poder absoluto en Onda Jerez cuando, hace unas semanas, consiguieron el apoyo de los ex ediles del PP e IU Regla Álvarez y Matías Acosta en una votación dirigida a modificar la composición del consejo de administración de Jecomusa. En la sociedad jerezana se ha acentuado el debate sobre la politización de la televisión municipal. La gran mayoría coincide en que la calidad de sus retransmisiones y programas es difícilmente superable y, también, en que el Gobierno de Pacheco ha abusado con demasiado descaro de las oportunidades que le ha dado este escaparate de lujo.