Alicante se convierte en la ciudad que tiene más salas de cine por habitante de toda España
Espectadores y críticos lamentan que el exceso de oferta no comporte estrenos originales
Alicante se convertirá en 2003 en la ciudad que tiene un mayor número de salas de cine por habitante. En estos momentos la capital tiene 68 salas en funcionamiento, y está prevista la apertura de otras 28. Sin embargo, la proliferación de nuevos espacios en los centros comerciales, de momento, no ha servido para que todos los estrenos lleguen a Alicante, y tampoco para estabilizar un público aficionado al cine independendiente. Críticos y espectadores coinciden: "mucha cantidad y calidad más bien poca". En definitiva, muchas salas para ver las mismas películas.
En pocos meses la oferta cinematográfica de Alicante ha aumentado de manera considerable, con la apertura de cómodas y modernas salas equipadas con alta tecnología de imagen y sonido. Los nuevos espacios cinematográficos están situados en los centros comerciales Puerta de Alicante y Vistahermosa, pero está previsto que en el hipermercado de La Goteta, y en el centro Promodeico de Sant Vicent, antiguo Pryca, se abran este año otras 28 nuevas salas.
Con este panorama, varios informes que se están ultimando en estas semanas apuntan que Alicante se conviertirá así en la ciudad que más salas de cine tiene por habitante de toda España, y se consolida entre el cuarto y quinto puesto en cuanto a número de espectadores. El pasado verano se inauguraron doce nuevas salas en el centro comercial Vistahermosa con capacidad para 2.390 espectadores, y hace unas semanas abrían otras 13 nuevas salas en el barrio de Babel, en el centro comercial Puerta de Alicante. En estos momentos Alicante, sólo la capital, tiene 68 pantallas, a las que hay que sumar las 11 de San Juan, en el área de influencia de Alicante, y las 28 nuevas.
La proliferación de pantallas de cine ha obligado a las direcciones de las salas a ir cambiando el día del espectador y las ofertas promocionales que habitualmente se realizan los miércoles, para evitar competir entre ellos. Así por ejemplo, en los Cines Box de Vistahermosa el día del espectador son los jueves, y en Yelmo Puerta de Alicante los lunes.
"Pero el eterno problema que tenemos en esta ciudad es que por muchas salas que abran la programación es la misma", lamenta Gonzalo Eulogio, crítico cinematográfico de la Cadena SER y Localía Televisión. A pesar del número de salas que se han abierto, según los críticos de cine, cada año hay casi un centenar de películas que se estrenan en Madrid o Barcelona y que no llegan a Alicante. "Hace años un estreno podrías mantenerlo tres meses en la cartelera y ahora apenas dura un mes, y además te encuentras que antes en la ciudad había 2 o 3 copias por cada película, ahora tienes 7 u 8 circulando", afirma Paco Huesca, estudioso del cine y ex gerente de los minicines Astoria, unas salas emblemáticas del centro de Alicante.
En resumidas cuentas, que los estrenos duran menos tiempo en la cartelera, aunque se pueden ver en más sitios. Gonzalo Eulogio calcula que cada año entre "80 y 100 películas que se estrenan en España no llegan a Alicante", según las estimaciones de este crítico cinematográfico apenas se estrenan 300 títulos nuevos en las pantallas alicantinas cada año. "Pero a toda esta situación hay un riesgo añadido", apunta Paco Huesca, "el centro de la ciudad se está quedando desierto en cuanto a salas, todas se concentran en el extraradio y en la periferia".
En este sentido, José Antonio Roche, profesor de Sociología de la Cultura y de las Artes en la Universidad de Alicante, lamenta que la abundancia en el número de salas no esté acompañada de un arte del ensayo o del reestreno. "Se reduce todo a más de lo mismo, en todos los cines proyectan el mismo tipo de películas", apunta el investigador. Unos y otros coinciden en reconocer que "no hay público suficiente" para tanto cine, y vaticinan que "pronto habrá una selección natural", y algunas salas se verán abocadas al cierre. Gonzalo Eulogio agrega, en este sentido, que es "evidente que no hay público para todos", y reflexiona que se ha producido un cambio notable en la cultura cinematográfica de los alicantinos. "La gente ahora no va al cine expresamente, acuden al centro comercial, comen, van de compras, y el cine es un complemento añadido", apunta Eulogio quien considera que se está cambiando el modelo y que se camina hacia un cine de "barrio, de proximidad y de comodidad".
Sin embargo, en la mayoría de las salas proyectan la misma programación. La situación en la provincia es similar, muchas pantallas pero los mismos títulos en la mayoría de salas. En Elche hay 11 salas en estos momentos, en Benidorm otras 13 y en Finestrat 11. Destacan luego las 11 salas de Torrevieja y las 12 de Petrer.
En La Vila Joiosa apenas tienen cinco, en Xàbia, Alcoi y Dénia dos, y sólo una única sala en Villena, Orihuela, Calp, y L'Alfàs del Pi. Si sumamos todas las salas abiertas en la provincia de Alicante son 150. "Se abren nuevas salas de cine para competir los unos con los otros", apunta el sociólogo Roche, "y echamos en falta una planificación coherente de la programación para evitar las lagunas que padecemos en la actualidad", concluye José Antonio Roche, profesor de la Universidad de Alicante.
Poco riesgo y mucho público
La radiografía cinematográfica de Alicante es un tanto contradictoria. Una ciudad líder en número de salas, la cuarta de toda España en cuanto a espectadores, y cada año casi cien títulos que no se estrenan. Nadie arriesga y todos aseguran tener público haciendo cola, sobre todo los fines de semana. "No se proyectan reestrenos, no tenemos cine independiente, ni se fomentan las versiones originales", asegura José Antonio Roche quien plantea la necesidad de volver a estrenar algunas películas que duraron poco en cartel, y que pasaron inadvertidas entre el público. Paco Huesca echa de menos una programación de cine comprometido, social y en versión original. "No hay una apuesta en este sentido, y cada día se proyecta menos cine en versión original, creo que se importan películas que no interesan", dice Huesca. Gonzalo Eulogio reconoce que Alicante tiene un público escaso, selecto y fiel al cine independiente. "Unas 200 o 300 personas son seguidoras de estas cintas, pero aunque sean pocos, en una ciudad con tantas pantallas, se merecen poder ver estas películas", apunta este crítico de cine. "Sin embargo, muchas veces en un estreno de una macroproducción americana hay 20 o 30 espectadores, y no pasa nada", agrega. Los cines Abaseis,en el barrio de Tómbola, próximos a la Universidad, son los únicos que están proyectando cine argentino, y producciones independientes. Ahora los gerentes de los recién inagurados cines Yelmo Puerta de Alicante anunciaron que iban a destinar una de sus 14 salas a proyectar películas en versión original y algunas independientes. Por último, los colectivos de personas sordas lamentan las escasas películas subtituladas que se proyectan en Alicante, y algunos minusválidos también han denunciado que en los cines de los centros comerciales les obligan a ver la película en su silla de ruedas en primer fila, y con las macrodimensiones de la pantalla padecen más que disfrutan de la película.
