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La OCU acusa a varios médicos de dar en dos pastillas adelgazantes sustancias que está prohibido mezclar

"Un buen abogado puede conseguir que Al Capone no entre en la cárcel". El director general de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), José María Múgica, resumió así la dificultad de atribuir un delito a los 22 médicos detenidos el pasado jueves por prescribir adelgazantes ilegales. Una orden ministerial de 1997 prohíbe preparar fórmulas con mezclas "de anorexígenos, psicotropos, hormonas, laxantes y diuréticos". Pero excluye de esta norma a las fórmulas magistrales preparadas a base de plantas medicinales.

Hecha la ley, hecha la trampa. La OCU presentó unas recetas que sirvieron para denunciar a la Comunidad de Madrid en abril la existencia de estos adelgazantes. Éstas muestran que uno de los médicos prescribía un derivado de una anfetamina en una pastilla y en otra varias plantas medicinales con acción diurética y laxante, según los análisis que encargó la OCU. Las pastillas había que tomarlas a la vez. El resultado era el mismo que si fueran en una sola pastilla.

El médico es Carlos Rubio y es coordinador de la Asociación de Médicos Formulistas. Ayer defendió que la práctica es legal: "El derivado de la anfetamina es benfluorex, que se puede encontrar en la farmacia con el nombre de Modulator. El resto son plantas medicinales". Ambas las mandaba como fórmulas magistrales. Además, Rubio retiraba algunos alimentos de la dieta del paciente. El benfluorex está indicado en casos de obesidad severa. Rubio prestó declaración el viernes y salió en libertad.

La OCU mostró unas cuartillas en las que Rubio pedía la firma al paciente para enviarle el tratamiento por correo. La farmacia que presuntamente las fabricaba es una de Leganés (al sur de Madrid) en la que la Guardia Civil encontró en julio miles de pastillas adelgazantes. La Ley del Medicamento, de 1990, prohíbe el envío de medicamentos por correo. El presidente de la Sociedad Española de Medicina y Cirugía Cosmética, Víctor García Jiménez, afirmó el sábado que el envío es una falta administrativa.

En la orden ministerial, Sanidad alerta de "la aparición masiva en el mercado de productos adelgazantes y el mal uso (...) a través de fórmulas magistrales (...) con sustancias norexígenas, solas o en asociación con otros medicamentos". Añade que hay "casos detectados de hipertensión pulmonar y otros desequilibrios".

El presidente de la Organización Médica Colegial, Guillermo Sierra, pidió la presunción de inocencia para los médicos. Pero avisó: "La legalidad y la ética no siempre van de la mano. Una conducta puede ser sancionable aunque sea impecable desde el punto de vista legal".

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