_
_
_
_
_

La empleada del SAS se desdice y afirma que no ordenó tirar los partes a la basura

La auxiliar administrativa del Servicio Andaluz de Salud imputada a raíz de la aparición de 7.000 partes médicos junto a un contenedor en Fuengirola (Málaga) trató ayer de exculparse de cualquier responsabilidad penal sin acusar tampoco a ninguna trabajadora del servicio de limpieza.

Elena R. C. declaró ante el juez que investiga los hechos que no ordenó tirar esos documentos a la basura, sino que como eran antiguos 'y es costrumbre reciclar la documentación antigua', los metió en bolsas de basura y las dejó en la puerta del almacén para que 'las retiraran'. Esta manifestación contradice la primera versión que dio la trabajadora, en la que admitió haber ordenado a la limpiadora que tirase los papeles.

Elena R. C. -imputada por un delito de infidelidad en la custodia de documentos- dijo que suponía que el servicio de limpieza del centro de salud recogió las bolsas de allí y las depositó junto al contenedor. Sin embargo, evitó inculpar a la limpiadora ya que insistió en que era nueva y sustituía al personal de vacaciones.

Ayer su abogado trató de suspender la comparencia ya que la mujer está embarazada. El juez rechazó la petición, pero fue breve y la interrogó menos de 10 minutos. A continuación, las partes personadas -el SAS, el Ayuntamiento de Fuengirola, el Colegio Médico y la Asociación contra la Injusticia y la Corrupción- trataron de hacerle preguntas, pero la imputada se negó a contestar. La próxima semana declararán los policías municipales que denunciaron los hechos al juzgado y los periodistas de la televisión local que encontraron los documentos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_