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El nuevo centro de inmigrantes de Algeciras se destinará a acoger menores

El Gobierno rehúsa a recepcionar el edificio construido hace un año

El Ayuntamiento de Algeciras y la Diputación de Cádiz han llegado a un acuerdo con la Junta de Andalucía para que el Centro de Internamiento Temporal de Inmigrantes (CETI) existente en la zona de La Marchenilla se destine a centro de inserción social de menores. Esta decisión se produce después de que, tras casi un año, el Gobierno siga sin querer recepcionar el edificio, pese a la continua llegada de inmigrantes.

El centro, construido con 2,5 millones de fondos europeos, fue cedido al Ministerio del Interior para que se utilizase como lugar de estancia temporal de inmigrantes. Según fuentes de la Delegación del Gobierno, 'no puede ser aceptada la cesión al tratarse de un edificio construido en un suelo rústico que no ha sido recalificado por el Ayuntamiento'.

A esta postura del ejecutivo respondió el alcalde algecireño, el andalucista, Patricio González. 'El Ministerio no quiere hacerse cargo del CETI porque pretende que nosotros también hagamos los caminos de acceso y otras obras menores. Por eso y ante la falta de respuesta del Gobierno, hemos decidido llevar a pleno la reversión de la cesión del edificio y convertirlo en un centro de menores', manifestó González. El Ayuntamiento aún desconoce cual será la fórmula jurídica que se empleará para que la Junta se haga cargo del inmueble.

La directora general de Reforma Juvenil de la Junta de Andalucía, Carmen Belichón, visitó ayer el centro y aseguró que 'el edificio es el lugar adecuado para cubrir la demanda de este tipo de infraestructuras'. Belichón insistió en que el centro debe estar funcionando en unos 15 días, con un primer módulo destinado a cinco infractores. En la fase final del plan, el centro albergará hasta 52 menores.

Según señaló la Directora General, en Andalucía se necesitan 500 plazas para menores. Ése fue el motivo por el que el Consejero de Asuntos Sociales, Isaías Pérez Saldaña, se dirigió al Ayuntamiento algecireño. La Junta solicitó, en principio, las instalaciones de la antigua prisión de la ciudad, petición que fue denegada por el Gobierno central. Posteriormente, Saladaña solicitó el CETI que, después de haber quedado terminado, aún no ha sido utilizado, ya que el Ministerio del Interior sigue haciendo uso del antiguo acuartelamiento de la Isla de Las Palomas, en Tarifa; para albergar temporalmente a los inmigrantes.

El futuro centro de menores podrá acoger a un total de 52 personas, que estarán repartidas en módulos de 11 internos cada uno. Allí los menores pasarán tres fases: la de observación, desarrollo y consideración; al menos así lo aseguró la concejal de Políticas de Igualdad del Ayuntamiento de Algeciras, Encarnación Gallego. La edil confirmó que el centro tendrá que sufrir 'algunas pequeñas reformas, al ser destinado a los menores'. Además, quedan disponibles otros 5.000 metros cuadrados para posibles ampliaciones en el futuro.

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Gallego también comentó que el nuevo centro de inserción de menores generará unos cien puestos de trabajo directos.

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