14 heridos en una batalla campal entre dos clanes en el recinto ferial de Pinto

El recinto ferial de Pinto se convirtió ayer en escenario de una batalla campal entre el clan de los Orbich y el de los Giovanni Costich, dos familias de feriantes que dirimieron sus disputas con escopetas de caza, bates de béisbol y palos. Al finalizar la contienda, en la que participaron más de 50 personas, se registraban 14 heridos, uno de ellos muy grave. La Guardia Civil desplazó al lugar de la refriega a casi un centenar de agentes, que tuvieron que efectuar disparos al aire para detener la violenta trifulca. Hubo 26 detenidos.

'Nos estaban esperando', aseguró una mujer de la familia de los Orbich, que relató que los enfrentamientos entre ambos grupos vienen de lejos. Según ella, el pasado 21 de diciembre varios hombres del clan de los Giovanni Costich cogieron a una chica de 18 años de la familia Orbich y la violaron en Fuenlabrada. Desde entonces, los dos clanes están en guerra.

Los heridos fueron trasladados a diversos hospitales, dependiendo del clan a que perteneciera cada uno de ellos, para evitar una peligrosa coincidencia. Por la tarde, los problemas se reprodujeron en el hospital Severo Ochoa de Leganés: los miembros de un clan quisieron tomarse la justicia por su mano con los allí hospitalizados. La intervención de los servicios de seguridad del centro impidió que la cosa pasara a mayores. Después se marcharon al Doce de Octubre, donde fueron vigilados por policías antidisturbios y guardias civiles.

Era la una de la tarde y en el recinto ferial de Pinto, situado en la calle de las Alpujarras, dentro del parque Juan Carlos I, los feriantes comenzaban a instalar las 15 atracciones, 11 casetas, cinco bares y una churrería que estarían abiertas entre el jueves y el domingo próximos para celebrar las fiestas locales del Santísimo Cristo del Calvario. La familia de feriantes conocidos en el sector como los Giovanni Costich acababan de instalar sus dos atracciones (La Olla y Canguro Show). Poco después llegó al recinto municipal otra familia de feriantes, los Orbich, de Fuenlabrada.

Entonces se inició la batalla campal. Los Giovanni Costich sacaron de sus vehículos palos y hasta alguna escopeta, según testigos de la reyerta. Los Orbich, a los que apenas les dio tiempo a bajarse de sus camiones, también se armaron con palos. 'Nos estaban esperando. Sabían que íbamos a venir y que antes o después se iba a liar una buena. El 21 de diciembre cogieron a una chica de 18 años de nuestra familia y la violaron en Fuenlabrada. Le hicieron tantas barbaridades que la reventaron. Desde entonces, siempre ha habido problemas con ellos', aseguró María Ángeles Lemo, de la familia de los Orbich. Ésta señaló que en el municipio de Sevilla la Nueva tuvieron otra batalla campal el 17 de septiembre de 1999. En aquella ocasión la discusión se produjo porque ambas familias pretendían instalar la misma atracción (un gusano loco), y un guardia civil tuvo que disparar al aire para frenar la contienda.

Ayer, cuatro jóvenes de entre 15 y 20 años comenzaron a destrozar las atracciones que ya habían montado los Giovanni Costich. 'Cogieron varios palos y empezaron a golpear todas las chapas de las atracciones. También se cargaron las bombillas. Entonces empezaron las carreras y los gritos', explicaría más tarde un alumno del instituto Pablo Picasso, colindante con el recinto ferial de Pinto. Los chavales prendieron fuego a la atracción Canguro Show, lo que hizo precisa la intervención de los bomberos.

Uno de los Giovanni Costich subió entonces a un BMW amarillo y comenzó a correr febrilmente por el ferial. En su trayectoria atropelló a tres personas, una de las cuales resultó herida grave. Algunos de los Orbich se subieron a continuación a un todoterreno rojo y la emprendieron contra las atracciones de sus contrincantes. El vehículo quedó empotrado contra La Olla, con la parte del motor y los cristales destrozados. Cada vez se iban sumando más contendientes de los dos grupos. Mientras, el resto de feriantes asistía perplejo a la batalla. Por fin, uno de ellos avisó a las 13.15 al teléfono 112 y alertó a los servicios de emergencia.

La Policía Local, ante la magnitud de la pelea, pidió refuerzos a la Guardia Civil, según el alcalde accidental de Pinto y responsable de Seguridad, Fernando González. La dotación de una veintena de todoterrenos Patrol de los Grupos Rurales de Seguridad se desplazó hasta el lugar de los hechos y sus efectivos lograron detener a los contendientes.

El más grave de los 14 heridos es un hombre del clan de los Orbich, de 43 años, que sufrió un traumatismo craneoencefálico muy grave con hematoma subdural. Fue trasladado en un helicóptero del Sercam al hospital Doce de Octubre, en la capital. Anoche estaba siendo intervenido de urgencia, y su pronóstico era muy grave, según un portavoz del centro. Una mujer de 35 años fue llevada por una ambulancia del Summa (servicio de urgencias de la Comunidad) al mismo hospital, tras recibir un golpe en la cabeza. El resto de los heridos, menos tres que recibieron el alta en el lugar de los hechos, fue trasladado a los hospitales Severo Ochoa y Universitario de Getafe.

La Guardia Civil detuvo a 26 personas (25 hombres y una mujer) de ambas familias y se incautó de dos escopetas, un revólver detonador, varias cajas de cartuchos, una pistola de fogueo, 15 barras de hierro, seis navajas, un azadón, dos cuchillos, un martillo hacha y varias tijeras, además de cadenas y una bayoneta. Miembros de los dos clanes retiraban anoche, por separado y custodiados por la Guardia Civil, sus casetas del recinto ferial.