El parking de la plaza del Castillo reduce su tamaño por los hallazgos arqueológicos
El consejero navarro de Cultura, Jesús Laguna, anunció ayer que el aparcamiento subterráneo de la Plaza del Castillo de Pamplona, la obra pública que mayor polémica ha desatado en la ciudad en los últimos años, se verá 'importantemente disminuido' en sus dimensiones finales debido a los hallazgos arqueológicos que las obras han puesto al descubierto. Laguna confirmó que la voluntad del Ayuntamiento de Pamplona es construir el controvertido aparcamiento, pero añadió que 'muy probablemente' el número de plazas previsto inicialmente, unas 800, se verá 'importantemente reducido' debido a los restos romanos y medievales hallados en las excavaciones.
La dirección general de Cultura del Gobierno navarro ha autorizado el inicio de las obras civiles sin que puedan afectar todavía al complejo termal romano excavado. No obstante, Cultura califica como 'precario' su estado y considera que su valor es 'relativo', por lo que autoriza continuar los trabajos hasta tener una visión completa de los hallazgos. Después, las termas serán levantadas. El Ejecutivo navarro considera suficiente el registro arqueológico formado por planimetrías y fotografías y no ve necesario conservar los restos.
