El Vaticano canoniza al fundador del Opus, Escrivá de Balaguer
La Iglesia le reconoce un milagro en 1992
José María Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei en 1928, será canonizado el año próximo coincidiendo con el centenario de su nacimiento. La asamblea general de la Congregación para la Causa de los Santos dio el visto bueno final ayer a una causa iniciada en 1981 que llevó a la beatificación del sacerdote español en mayo de 1992. La última palabra la tiene el Papa, encargado de firmar el decreto de santidad, pero se trata de un trámite formal que será cumplido por Juan Pablo II mañana, jueves.
El año 2002 se perfila ya como el Año del Opus Dei. A las celebraciones previstas por la obra para festejar el centenario del nacimiento de su fundador se añade ahora el mayor homenaje que podía rendirle la Iglesia, hacerle santo. La fecha de la ceremonia será anunciada por el Papa, pero se habla ya de la posibilidad de que se elija el aniversario de su muerte, el 26 de junio de 1975.
Los testigos
La causa de la canonización de Escrivá, incluyendo el tiempo necesario para superar el primer escalón en el proceso, el de la beatificación, ha durado 21 años. Fue iniciada en 1981 a los seis años de su muerte (la nueva normativa aprobada en 1983 por Juan Pablo II exige una espera mínima de cinco años) en Roma por el entonces cardenal de la ciudad Ugo Polleti, y requirió dos procesos separados, uno en la Ciudad Eterna y otro en Madrid. Este último proceso suscitó considerable polémica porque los jueces eclesiásticos rechazaron a la práctica totalidad de los testigos contrarios, en su mayoría ex miembros del Opus Dei, que no fueron aceptados por considerar el tribunal que existía animadversión contra el futuro beato. El único testigo contrario cuya declaración fue escuchada fue rechazado también, al final, por los mismos motivos.
Del proceso de beatificación de Escrivá, reclamado por un tercio del episcopado mundial, se criticó también su celeridad. Fue proclamado beato a los 17 años de su muerte, y será elevado a los altares en calidad de santo 10 años después, un tiempo de espera mínimo comparado con la media de 50 años requerida en la mayor parte de los procesos. Al fundador del Opus Dei le han sido aprobados dos milagros. Uno de ellos, la curación inexplicable en 1976 de la religiosa Concepción Boullón Rubio, de 70 años, que padecía un tumor en un hombro, le abrió el camino a la beatificación; el segundo, la curación en 1992 del médico Manuel Nevado Rey, al que le había sido diagnosticado una grave enfermedad en la piel, le servirá para ser proclamado santo.
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