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La Generalitat propone dar permisos a los inmigrantes que no se pueda expulsar

La medida afectaría a los extranjeros de la plaza de André Malraux

El secretario para la Inmigración de la Generalitat, Ángel Miret, propuso ayer que se den permisos temporales, renovables cada tres meses, a los inmigrantes que tienen una orden de expulsión que no se puede ejecutar porque los países a los que dicen pertenecer no les reconocen como ciudadanos suyos. En esta situación se hallan los subsaharianos liberados el lunes, un mes después de haber sido detenidos en la plaza de André Malraux. Aunque libres, su situación sigue incierta porque carecen de papeles.

En declaraciones a Radio Barcelona, el responsable de Inmigración de la Generalitat comentó que otros países europeos han optado por conceder permisos temporales a los inmigrantes cuya orden de expulsión no puede ejecutarse. Estos permisos, según Ángel Miret, se renovarían 'cada tres meses y estarían sujetos a la orden de expulsión en el momento que se pueda ejecutar'.

Miret consideró que es mejor encontrar una solución legal para estos sin papeles que 'no tener centenares o miles de personas moviéndose por el país sin documentación y sin tener manera de ganarse la vida porque no se les reconoce como ciudadanos'.

De los 24 subsaharianos liberados el lunes tras ser detenidos hace un mes durante la redada policial en la plaza de André Malraux, 16 han permanecido en el Centro de Internamiento de la Verneda de Barcelona y el resto en Murcia. Estos últimos han regresado a Barcelona porque su abogado les pagó el billete tras ser liberados. Todos estos subsaharianos, originarios de Sierra Leona y Nigeria, siguen careciendo de papeles. Los que estuvieron retenidos en la Verneda tampoco disponen de documentación que acredite que han sido puestos en libertad. Esta circunstancia les ha impedido acceder a la oferta de alojamiento de la Cruz Roja y Cáritas y, como otros compatriotas suyos desalojados de la plaza de André Malraux, duermen bajo techo gracias a la solidaridad de entidades como CGT, SOS Racismo, Casa de la Caridad y EUiA, que les han cedido sus locales.

La Plataforma de Apoyo a los Inmigrantes advirtió ayer, sin embargo, que en estos locales 'no se garantizan las condiciones de salubridad ni de comodidad necesarias' e insistió en la necesidad de que Cáritas y Cruz Roja sean flexibles a la hora de aceptar a los subsaharianos que piden alojamiento. Estas entidades afirman que no pueden cobijar a los inmigrantes con una orden de expulsión en trámite.

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