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RAÍCES

Un centro expositivo recuerda el legado del Poniente granadino como última frontera de Al-Ándalus

Una antigua mezquita reconvertida en iglesia renacentista por Diego de Siloé en la localidad granadina de Montefrío alberga desde el pasado 14 de septiembre el Centro de Interpretación de la Última Frontera de Al-Ándalus, denominado El Centinela, un espacio expositivo que recrea la época nazarí en los 16 pueblos del Poniente granadino.

En la Iglesia de la Villa de Montefrío, sede de este centro temático, el visitante se encuentra con la historia de las gentes y los pueblos del Poniente que durante casi un siglo defendieron la ciudad de la Alhambra. El Centinela, ubicado en un promontorio rocoso, ha sido promovido por el Consorcio del Poniente y financiado por el Leader II (programa de desarrollo local con financiación de la Unión Europea) del Poniente granadino. El legado cultural de estos pueblos, los más occidentales de la provincia granadina, aún pervive en sus torres, atalayas, castillos y fortalezas, que constituían un complejo sistema defensivo que guardaba el camino hacia la vega granadina.

El centro temático nace con la idea de mostrar la huella que dejó esta tierra de frontera en su propio territorio. Además de las fortificaciones, el patrimonio cultural de estos municipios de frontera se completa con la cultura, el arte y la agricultura de Al-Ándalus. Estructurado en capillas centrales y laterales, El Centinela recrea, bien con restos arqueológicos, bien con medios audiovisuales, las vicisitudes de estos pueblos.

Esos restos arqueológicos son testigos de lo que fue el último reducto del reino de Granada, la última frontera de Al-Ándalus. Las capillas muestran cómo eran los personajes de frontera (el alcaide entre moros y cristianos, los alfaqueques y corredores de aduanas...), el patrimonio de Al-Ándalus en el Poniente, el arte, la cultura, los juegos medievales y las estrategias que las tropas cristianas pusieron en práctica en la frontera. La sección Los reyes también lloran rememora la entrada de los cristianos en las plazas musulmanas.

Triunfo de la nueva fe

Uno de los espacios del museo se dedica a las fronteras del siglo XXI: el racismo, la inmigración, la xenofobia. La iglesia renacentista se levanta sobre el cerro de la Encarnación. Allí, desde donde se divisa el horizonte del Poniente, los Reyes Católicos ordenaron construir una iglesia sobre los restos de la alcazaba el-Hins Montefrid, que fue un enclave del sistema defensivo del reino nazarí. Su ubicación en lo alto de un cerro y su advocación a la Encarnación de Cristo la convirtieron en metáfora del triunfo de la nueva fe.

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Cerca se encuentran numerosos yacimientos arqueológicos: el conjunto de la Peña de Los Gitanos, en Montefrío, la necrópolis de Sierra Martilla, en Loja, las pinturas rupestres de Moclín o el dolmen de Arenas del Rey. Según un comunicado del Consorcio Poniente Granadino, el objetivo del centro de interpretación es que 'los sillares que Diego de Siloé dibujó para construir esta iglesia hablen del legado cultural de esta tierra de frontera'.

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