Tamara canta en Alcalá de Henares los boleros de siempre
El bolero sentido y apasionado -que no vivido- llega hoy a la plaza de Cervantes de Alcalá de Henares gracias a la cantante sevillana Tamara. Con sólo 17 años cumplidos hace dos meses, Tamara se ha convertido en toda una gran dama de la canción merced a los dos discos publicados hasta la fecha. El primero, Gracias, editado hace dos años, alcanzó una cifra de ventas impensable para una debutante: más de medio millón de copias.
Del actual, Siempre, editado a finales del pasado mayo, ha despachado cerca de 250.000 unidades, de las cuales 100.000 se vendieron sólo la primera semana, lo que la convierten en doble platino solamente con el primer sencillo extraído del álbum. Su segundo sencillo será Herida de amor, que está a punto de salir al mercado.
Asombra el éxito de una adolescente que reconoce no haber vivido las historias de pasión, amor, desamor y celos que cuentan sus boleros.
'No me ha dado tiempo a vivir lo que canto. No he tenido ni novio, ni me han besado nunca', reconocía la cantante sevillana el mismo día en el que su compañía le entregaba, a primeros de junio, el disco de oro que le acreditaba haber vendido esas primeras 100.000 copias.
Y es que Tamara experimenta una transformación cuando le canta a ese amor carnal en boleros apasionados que mezclan a partes iguales sensualidad, sexo, celos y odios con el candor y la inocencia de la que empieza a abandonar la adolescencia. 'A mí me envuelve la música cuando canto esas cosas. Es una sensación que no sé explicar. Parece que lo estoy viviendo, que lo que digo me está ocurriendo en ese momento', se justificaba en aquella misma ocasión.
Producción lujosa
Con producción lujosa a lo Miami de Bebu Silveti, Siempre ha consagrado a Tamara, una perfecta desconocida cuando no hace muchos años salía imitando a Pocahontas o Laura Pausini en Menudas estrellas, de Antena 3 TV, programa de imitaciones muy seguido por los ojeadores de nuevos talentos de la canción.
Además, Tamara es nieta del cantaor Rafael Farina, por lo que desde muy pequeña se ha acostumbrado a vivir cerca de la popularidad y el éxito.
Todas esas circunstancias y la elegancia añadida a no haber hecho ni una mueca de pavor ni una mala palabra en público cuando otra artista irrumpió abruptamente en el panorama musical con idéntico nombre artístico y una estética y gusto diametralmente opuestos, la han convertido en una artista muy querida por un público convencional y sincero que vive sus grandes emociones sólo a través de sus boleros.
Tamara actúa hoy en la plaza de Cervantes, en Alcalá de Henares, a partir de las once de la noche.
