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Cultura tarda 10 años en abrir al público yacimientos romanos y árabes en Almería

Almería contará en 15 días con un trozo más de su pasado romano y medieval abierto al público. Se trata de unas balsas de salazón cuya estructura se considera 'única' de la época romana y un paño de muralla califal perteneciente a la época de Abderramán III. Ambos restos, hallados en el mismo recinto de unos 500 metros cuadrados, han sido cubiertos con un lucernario y una escalinata con pasarela que permitirá su visita en el parque Nicolás Salmerón y a los pies del edificio de viviendas que se construyó en el mismo terreno. La intervención, que ha consumido 10 años, ha supuesto una inversión de 50 millones de pesetas.

La importancia del hallazgo de la muralla califal se corroboró con la aparición de restos de material cerámico y diversos utensilios de la misma época y culminó con la aparición del primer asentamiento que aparece en la capital almeriense del período romano: las cubiertas de salazón de pescado que posteriormente a su uso primero fue utilizado por los árabes. Las seis piletas de salazón de pescado semiexcavadas en la roca tienen fechada su actividad entre finales del siglo I y finales del siglo IV.

Los restos medievales mandados construir por Abderramán en el año 995 conservan un paño de muralla de unos 45 metros de longitud cortado por un pasillo-puerta. 'La coincidencia en el espacio del paño de muralla califal con las balsas de salazón une el pasado árabe y romano de Andalucía. Aquí hay muchos metros cuadrados que forman parte de la visita y que se convertirán en un equipamiento cultural para Almería', dijo la consejera de Cultura, Carmen Calvo.

El estado actual de las cubiertas romanas es 'razonablemente satisfactorio', según técnicos de Cultura, habida cuenta de la posterior utilización árabe a la que estuvieron sometidas. Respecto a la muralla califal, derruida en un 80% de su trazado, la intervención deja al descubierto precisamente lo que aparece como cimentación de dos torreones que flanquean una puerta de la ciudad. La construcción del edificio que envuelve el conjunto restaurado por Cultura ha tardado 10 años.

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