_
_
_
_
INSTALACIONES

Caja Madrid invertirá 1.200 millones en un centro cultural y educativo

El proyecto más peculiar de la Obra Social de Caja Madrid para el presente año es la Casa Encendida, un edificio de 1913 que aspira a iluminar el porvenir cultural, educativo y laboral de miles de jóvenes. La caja de ahorros destinará 1.200 millones, de los 22.000 que va a emplear a lo largo del año en labores sociales, a rehabilitar este inmueble de estilo neomudéjar que lleva cerrado más de dos decenios.

La Casa Encendida conservará la arquitectura original en la fachada, el patio central y la escalera (obra de Fernando Arbós), y se someterá a un cambio de imagen en el interior, según apuntaron ayer los promotores. No en vano, en los 6.500 metros cuadrados de superficie útiles funcionarán, a finales del año próximo, cinco salas de exposiciones, un auditorio, una sala de proyecciones, una biblioteca de trabajo, un centro de información, una tienda solidaria, un espacio 'para oír de otra forma' , estudios de radio y grabación, un laboratorio de fotografía y uno de inglés, un taller de informática, salas de ensayo musical, una ludoteca y un café, entre otras dependencias. De ahí que Caja Madrid haya previsto una afluencia anual de 300.000 personas a este inmueble, situado en el número 2 de la ronda de Valencia, en Embajadores.

La Casa Encendida paliará, a ojos de sus artífices, la lentitud del sistema de enseñanza, 'que no está evolucionando tan rápido como sería deseable para acompasar la educación a los requerimientos del mundo moderno, en el que la tecnología de la comunicación modificará el modo de desenvolverse de los futuros ciudadanos'. De ahí que tenga el propósito de ser un centro cultural (ocio y promoción de nuevos creadores de artes plásticas, música, teatro, danza y literatura), un centro social (una escuela de solidaridad y otra de medio ambiente forjarán voluntarios), un sitio de trabajo y estudio (con informática e inglés a la última) y un lugar de encuentro (el café y el patio), todos en uno.

Una de las actividades más ambiciosas de la casa en ciernes consistirá en que jóvenes promesas tengan la oportunidad de dar muestras de su arte a la gente consagrada: 'El cantante podrá ser escuchado por Plácido Domingo, el pintor hablará de su obra con Barceló y el bailarín danzará ante Ángel Corella', aseguran los programadores.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_