_
_
_
_
_

Telefónica se opone a que haya más licencias GSM y amenaza con recurrir a la justicia

Telefónica ha decidido dar batalla en el proceso de concesión de nuevas licencias de móvil. La compañía ha hecho llegar sus planteamientos a la presidencia del Gobierno y a los ministros de Economía y Ciencia y Tecnología por carta, en la que afirma que la concesión de licencias "conduciría a un replanteamiento de las inversiones" y critica que el Gobierno quiera "otorgar nuevas licencias de una tecnología ya madura", en referencia al GSM. Ante esa posibilidad, Telefónica advierte de que acudirá a la justicia si el Gobierno "desposee a las operadoras de las frecuencias ya asignadas".

Telefónica se había mantenido hasta ahora al margen de las iniciativas anunciadas por sus competidoras (Airtel, Amena y Xfera) contra las medidas que prepara el Gobierno para introducir más competencia en el sector. Sin embargo, los estrategas de la compañía que preside César Alierta han decidido pasar a la ofensiva en defensa de lo que consideran "derechos adquiridos" de la operadora. El informe sobre la posición de Telefónica ha sido enviado al gabinete del presidente del Gobierno, José María Aznar; al ministro de Economía, Rodrigo Rato; y a la ministra de Ciencia y Tecnología, Anna Birulés. En el documento, Telefónica se muestra contraria a modificar el modelo actual de competencia "por un supuesto objetivo de fomento de la competencia a través de la entrada de nuevos operadores", ya sea mediante la concesión de nuevas licencias o con la apertura de las redes ya existentes para que puedan ser utilizadas terceros. En última instancia, Telefónica asumiría que las licencias fueran para explotar el UMTS (Sistema Universal de Telecomunicaciones Móviles), que no estará disponible hasta agosto de 2001, y no de GSM, la que se utiliza actualmente. Advierte, no obstante, que las medidas "conducirían a un replanteamiento de las inversiones".

Escasez de espectro

La compañía argumenta que "la telefonía es el pilar sobre el que se asienta el desarrollo de la sociedad de la información en España" y que las medidas que aún tiene que aprobar el Consejo de Ministros pueden "llevar a desnaturalizar y desestabilizar un modelo de éxito sustentado sobre el eje de la inversión". Telefónica recuerda que España ha alcanzado un grado de extensión, cobertura geográfica (98%) y penetración de telefonía móvil (un 57% de la población) que se encuentra por encima de la media europea y que introducir cambios como los anunciados "significaría no garantizar inversiones ya previstas para los próximos 10 años (5,7 billones de pesetas), la creación de 100.000 empleos y un importante y bien direccionado gasto en investigación y desarrollo". A su juicio, España cuenta ya con suficientes operadores de acuerdo con su población y densidad.El documento se refiere a las propuestas de Ciencia y Tecnología como "experimentos" que pueden poner en riesgo y debilitar los logros alcanzados hasta ahora. En ese sentido, la operadora se alinea con las tesis de Economía frente a las del departamento de Birulés al afirmar que no tiene sentido conceder nuevas licencias de telefonía GSM cuando se está apostando por "una tecnología superior y sustitutiva, como el UMTS, sobre la que se soportarán los servicios del futuro". "Constatamos, por insólito, que se quieran otorgar nuevas licencias de una tecnología ya madura, hecho sin precedente europeo", afirma la carta.

La operadora, que desde la llegada de Alierta mantiene una actitud conciliadora con los reguladores, basa su rechazo a más licencias en criterios técnicos. Según sus estrategas, no hay espectro radioeléctrico disponible en la modalidad GSM 1800 desde que se otorgó a Telefónica, Airtel y Amena en 1998 ni en UMTS desde que se adjudicaron el pasado marzo, por concurso, a estas tres y a Xfera.

Telefónica advierte de que "desposeer a los operadores de las frecuencias ya asignadas, conllevaría agredir los derechos adquiridos por estos que obtuvieron licencias anteriormente, con la posibilidad de presentar los correspondientes recursos administrativos". Sus directivos, sin embargo, han reconocido que puede haber espectro para UMTS cuando la Unión Internacional de Telecomunicaciones amplíe las bandas de frecuencias atendiendo a la solicitud de las operadoras de toda Europa.

La carta-informe de Telefónica llama la atención sobre la "inseguridad jurídica" que se crea con la modificación de las condiciones de competencia marcadas en el concurso de marzo y se une implícitamente a las otras operadoras, que han pedido al Gobierno que las libere de sus compromisos de inversión y de los avales correspondientes por el incremento de la tasa por uso de espacio radioeléctrico (100.000 millones durante 20 años para los ganadores del UMTS) y la posible concesión de nuevas licencias.

Telefónica advierte, además de que las medidas pueden provocar "una fragmentación social y territorial, al concentrar los operadores sus inversiones en las zonas más rentables". Señala que, en última instancia, será el consumidor quien acabe perjudicado.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_