Dos clubes españoles en la nueva SuproLiga

La Euroliga cambiará de nombre, de imagen, de formato de competición y de criterios económicos a partir de la próxima temporada. Las importantes novedades presentadas ayer en Salónica por la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) afectan de pleno a los clubes españoles, que pasarán a contar con dos representantes en lugar de los tres con los que había venido compitiendo en la máxima competición continental desde la temporada 1991-92. Según los nuevos criterios de clasificación para el torneo, España podría haber logrado mantener a sus representantes en el caso de que el Barcelona se hubiera clasificado para la final que se disputa hoy o bien si hubiera logrado que alguno de sus clubes hubiera estado en las semifinales de la Copa Saporta. Todo y así, la Liga ACB tenía esperanzas de haber mantenido a sus tres representantes -este año Barcelona, Real Madrid y Caja San Fernando- gracias a las dos invitaciones que se reserva la FIBA pero que serán concedidas a clubes pertenecientes a países con menor potencial. La nueva competición, que tendrá como colofón la Final a Cuatro que se jugará en el pabellón Fernando Buesa Arena de Vitoria en mayo de 2001, tendrá un formato diferente, con una primera fase con cuatro grupos de seis equipos, de la que quedarán eliminados los dos últimos; una segunda fase con dos grupos de ocho equipos, eliminatoria de cuartos de final y Final a Cuatro. Las novedades presentadas ayer incluyen el cambio de nombre de la competición que hasta 1991 se denominó Copa de Europa y hasta 1996 Liga Europea y que ahora dejará de llamarse Euroliga para pasar a ser la SuproLeague (Suproliga), según se afirmó simplemente porque esta denominación será más atractiva. Uno de los cambios más importantes es que a partir de la próxima temporada la FIBA centralizará los derechos de televisión y comerciales de los 24 clubes que participen en el torneo y que han sido vendidos a la empresa ISL Worldwide a cambio de 3.400 millones de pesetas, hasta que concluya la temporada 2003-04. El reparto de los ingresos se redistribuirá en un 90,5% entre los clubes participantes, que tendrán un mínimo garantizado de 250.000 dólares.

El acuerdo se ha hecho oficial a pesar de la posición contraria de varios de los clubes más potentes de las Ligas griega, los española e italiana, asociados en la Unión de Ligas Europeas a cuyo frente está el presidente de la ACB, Eduardo Portela. Algunos de estos clubes poseen contratos en vigor por los que han vendido sus derechos de televisión hasta 2008, caso del Barcelona, y que en principio deberán romper.