"Vivir en la sierra madrileña es una apuesta muy moderna"
Nacido en El Escorial en 1961, Rafael Martín es uno de los más reputados músicos españoles expertos en la zanfona. Tal es su pasión por ese extraño instrumento de cuerda y fricción, que, junto a Jesús Reolid y Luis Delgado, ha creado la Asociación Ibérica de la Zanfona (AIZ), con página en Internet (www.zanfona.com). Imparte cursos sobre su construcción y manejo y su sonido peculiar ha sido base de muchas de las composiciones de La Musgaña, grupo en el que participó a mediados de los ochenta, y, más recientemente, de La Bruja Gata, un nuevo sexteto de diversas procedencias que constituye una de las más serias aportaciones de la nueva música tradicional española. Residente en Lozoyuela, Rafael Martín es también profesor de música en el Instituto Nacional de La Cabrera. Además toca con suma soltura el laúd, pero es el sonido hipnótico de la zanfona lo que le fascina, una fijación que le quedó de pequeño cuando vio a Spencer Tracy tocar una en la legendaria película Capitanes intrépidos. Su vida gira, casi entera, en torno a ella. Es capaz de recorrerse media Europa si tiene noticias de que en algún pueblito remoto se ha visto un ejemplar único. De tanto trajín ha aprendido en Francia la técnica de "pata de perro", que conjuga ritmo y melodía que nunca se había utilizado en España. Pregunta. Si la zanfona ya es rara, la suya parece que lo es aún más, ¿no?
Respuesta. Es una zanfona moderna. Tiene el funcionamiento de una tradicional, pero con más cosas: cambios de afinación y pastillas eléctricas, lo que le da la posibilidad de sonar amplificada y poderle adaptar un pedal de efectos, como una guitarra eléctrica.
P. Añadirle electricidad, ¿es idea suya?
R. No. Así se hacen en Francia desde hace mucho. Es el país que más ha cultivado la zanfona. Antes eran más limitadas, y la electricidad le ha dado más posibilidades.
P. Aún así, ¿tiene futuro este instrumento?
R. Siempre y cuando se componga específicamente para él, sí. No basta recrear piezas tradicionales. Se cree, equivocadamente, que sólo la tocaban los ciegos para sus coplas, sin saber que con la zanfona se han compuesto siempre las piezas más vanguardistas de cada época musical.
P. ¿Se puede sacar su sonido desde un ordenador?
R. Es un sonido muy especial que no puede reproducir ningún sintetizador. Y eso que es sonido muy ancestral, al mismo tiempo que muy moderno.
P. Como residente en la sierra madrileña, ¿le cuesta bajar a la capital?
R. En un medio no urbano se vive más tranquilo y cuando bajo a Madrid noto mucho el estrés que se vive en la ciudad. Creo que vivir en la sierra es una apuesta moderna, cada vez hay más gente que lo hace. Menos mal que casi siempre bajo por motivos relacionados con la zanfona. Cuando la tocaba en el Retiro, la gente se interesaba mucho.
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