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60 bandas han sido detenidas en Valencia y Alicante en lo que va de año

El litoral valenciano se ha convertido en una de las zonas preferidas para delinquir por las organizaciones criminales, junto a la Costa del Sol, la Costa Brava y Madrid, según fuentes policiales. En lo que va de año, la Policía ha desarticulado más de sesenta bandas delictivas, repartidas a partes iguales entre la costa alicantina y la valenciana. Una cifra que sitúa a ambas provincias entre las siete con mayor incidencia del crimen organizado. Pero, en proporción al número de habitantes, ninguna alcanza el volumen delictivo de la provincia de Alicante.El narcotráfico continúa siendo la principal fuente de ingresos de las decenas de organizaciones criminales que operan en la Comunidad, y todavía es el negocio clandestino que más violencia y ajustes de cuenta genera. De hecho, 12 de las 29 bandas desarticuladas este año por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía en Valencia se dedicaban a la droga.

Sin embargo, los expertos policiales alertan sobre la creciente importancia que han cobrado en los últimos años en estas tierras la extorsión, el robo de coches de lujo y la introducción de inmigrantes sin papeles, especialmente de la Europa del Este. A las mujeres las prostituyen en clubes de alterne, y a los hombres los explotan en tareas agrícolas o en la construcción. Este año han desmantelado en Valencia seis redes que traficaban con inmigrantes (con más de un centenar de detenciones entre todas) y cinco especializadas en vehículos sustraídos.

Bandas del Este

La Policía de Alicante investigó durante el primer semestre a treinta y tres grupos delictivos. La mayoría son nacionales, seguidos en importancia por las redes de los países del Este, que han desbancado en importancia a las bandas británicas, austriacas o italianas.Con todo, la palabra mafia es tabú en el círculo del poder político de Alicante y, por extensión, en el ámbito policial. "Aquí no hay mafias", repiten hasta la saciedad desde el subdelegado del Gobierno, Luis Garrido, hasta los agentes policiales. Sin embargo, la Policía difunde, hasta tres veces por semana, la desarticulación en Benidorm, Torrevieja, Dénia o Xàbia de organizaciones criminales dedicadas a la extorsión o al secuestro de empresarios, al narcotráfico, el blanqueo de dinero o la inmigración ilegal. Pero "de mafias nada", apostillan en cada caso las autoridades, sin importarles que la Real Academia de la Lengua permita definir con esta palabra a "cualquier organización clandestina de criminales".

Sin embargo, el Gobierno reconoce que en el primer semestre la Policía investigó en Alicante a treinta y tres grupos que "revestían caracteres de organización criminal", de los que doce "han revelado indicadores suficientes para su calificación como grupos de delincuencia organizada".

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