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Un bando pedirá a los vecinos de Algete que se sometan a la prueba del ADN

El alcalde de Algete (13.480 habitantes), Jesús Herrero, ha dado un paso insólito para descubrir al autor del asesinato de Eva Blanco, la joven de 16 años apuñalada y violada en abril de 1997. Herrero, apoyado por colectivos vecinales, ha anunciado que va a emitir un bando para que todos los hombres mayores de 16 años se sometan voluntariamente a una prueba de ADN (bastará saliva o pelo). Este análisis se cotejará con los restos genéticos que la Guardia Civil recogió del cuerpo de la víctima.

El alcalde algeteño calcula que en el municipio están empadronados unos 5.000 varones mayores de 16 años. "Primero vamos a ponernos en contacto con los juzgados para saber cómo tenemos que hacer la recogida de las pruebas. No hace falta ni extraer sangre: con un cabello o con un poco de saliva es suficiente", comentó ayer Herrera.El regidor, que se ha ofrecido a ser el primero en hacerse la prueba del ADN, no cree que esta insólita iniciativa vaya a despertar recelos ni sospechas entre los vecinos que accedan a hacérsela y los que no. Manuel Blanco, padre de la víctima, ya se ha hecho la prueba y apoya este argumento. Aunque la investigación del asesinato sigue abierta y bajo secreto de sumario, a lo largo de los dos años y medio que han transcurrido desde el suceso nunca se ha descartado que el autor del crimen sea una persona cercana o conocida por la joven. La familia y los investigadores sostienen que Eva nunca se hubiese subido a un coche con alguien que no conociese y que la llevó hasta el lugar donde fue asesinada y violada, una cuneta de la carretera que une esta localidad con Cobeña. La muchacha había salido el sábado 19 de abril, por la tarde, a dar una vuelta con sus compañeros. Al filo de la medianoche, una amiga la acompañó hasta la urbanización Valderrey, a escasos 700 metros de su casa. Fue la última persona que la vio con vida. Los miembros de la comisión vecinal Eva Blanco dudan de que el autor del asesinato tuviera en aquella época menos de 15 años -no tenía edad para conducir-, pero creen que a través del ADN, si no se puede hallar al culpable, sí quizá a algún familiar. Por otro lado, fuentes del Ministerio de Justicia recordaron que debe ser el juzgado que instruye el caso el que decida si acepta o no las pruebas del ADN.

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