MANOLO S. URBANO Insólito paisaje de playa en pleno verano barcelonés
La playa de la Barceloneta ofrecía ayer este insólito aspecto tratándose del último fin de semana de julio, cuando se supone que las temperaturas alcanzan su punto más alto y las playas la mayor ocupación. El descenso de las temperaturas ha sido notable en los últimos días y las tormentas y chubascos han sido la norma. La inestabilidad meteorológica, que según las previsiones seguirá reinando sobre Cataluña, al menos en los próximos días, amenaza con repercutir en las vacaciones de los cientos de miles de personas que salieron ayer de las ciudades o lo harán hoy. Sin embargo, la niebla y la lluvia que se cernieron ayer sobre Barcelona no se extendieron a todo el litoral catalán ni consiguieron ahuyentar a los bañistas. Las playas del Maresme estaban ayer concurridas, al igual que las de determinados tramos de la Costa Brava y la Costa Dorada, en las que lució el sol de forma un tanto aleatoria.
