Mubarak da un plazo de dos meses a Barak para encarrilar el proceso de paz
El presidente egipcio, Hosni Mubarak, ha concedido un plazo de gracia de dos meses al primer ministro de Israel, Ehud Barak, para que encarrile el proceso de paz. Éste fue uno de los principales acuerdos que alcanzaron ayer los dos líderes en la cumbre que celebraron en Alejandría, en la que pusieron las bases para desbloquear el diálogo árabe-israelí, congelado durante los tres últimos años. Esta entrevista es la primera de las cuatro que celebrará Barak en poco menos de una semana para intentar impulsar el proceso de paz.
El primer ministro israelí se reunirá mañana con el presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, en la frontera con Palestina. El miércoles, Barak viajará a Ammán para encontrarse con el rey Abdalá, y el jueves volará a Estados Unidos para hablar con su presidente, Bill Clinton. Dos horas de conversación en solitario entre Hosni Mubarak y Ehud Barak, en el palacio de verano de Ras Tini, en Alejandría, fueron ayer, al parecer, suficientes para restaurar la confianza entre Egipto e Israel, deteriorada durante los tres últimos años como consecuencia de la política radical del Gobierno del Likud presidido por Benjamín Netanyahu, a quien el propio Mubarak se había negado en redondo a recibir en los últimos meses.
El diálogo entre Mubarak y Barak, celebrado tres días después de que el primer ministro israelí tomará posesión de su cargo, se desarrolló en su mayor parte a puerta cerrada. Mientras, las delegaciones ministeriales trataban de restaurar las conversaciones interrumpidas en 1996, cuando la derecha israelí bloqueó el proceso de paz.
No hubo pactos en la cumbre ni acuerdos concretos, entre otras razones porque ésta no era su finalidad, pero permitió, sin embargo, a egipcios e israelíes restablecer la confianza mutua.
"Tengo confianza en la ocasión que se nos ofrece. Debemos explotarla para dar una nueva oportunidad al proceso de paz", afirmó Barak a los periodistas.
El primer ministro israelí aseguró además que trabajará con rapidez en busca de una solución para solventar los tres conflictos -Palestina, Siria y Líbano- al mismo tiempo, sin establecer ningún tipo de prioridades.
El presidente egipcio, Hosni Mubarak, recordó a Barak que había que "preparar las condiciones" para restablecer el diálogo. "Lo importante ahora es reanudar las negociaciones de paz. Demos a este hombre un poco de tiempo; dos meses, por ejemplo", afirmó Mubarak.
Mañana domingo Barak viajará hacia la frontera israelo-palestina, en el puesto de Erez, para encontrarse por vez primera con Yasir Arafat. No se esperan tampoco acuerdos concretos, ni siquiera el desbloqueo ansiado de los Acuerdos de Wye, firmados en Estados Unidos el pasado noviembre, a pesar de que los familiares de los presos políticos palestinos han empezado a movilizarse reclamando la libertad de 750 detenidos pactada ante Bill Clinton. La cumbre de Barak-Arafat será, como la de Mubarak ayer, de tanteo.
