La coalición PNV-EA sólo perderá ante el PP en Vitoria, según un sondeo del Gobierno vasco Conocimiento y victoria

La coalición formada por el PNV y EA sería la opción más votada en las Juntas Generales de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya y en los ayuntamientos de Bilbao y San Sebastián, pero será batida en Vitoria por el PP, según un sondeo sobre intención de voto divulgado ayer por el Gobierno vasco. La unión electoral de los partidos de Arzalluz y Garaikoetxea no aporta, sin embargo, más votos y representantes de los que tenían ya por separado. Como sucediera en las elecciones autonómicas de octubre, los populares y Euskal Herritarrok se presentan como las fuerzas en ascenso.

El sondeo, realizado por encargo de la Presidencia del Gobierno vasco entre los días 9 y 20 de abril, dibuja un panorama complicado para el día después del 13 de junio. Sobre todo en Álava, donde los resultados quedan tan apretados que las posteriores alianzas se presentan más decisivas que la propia jornada electoral. La encuesta pone de manifiesto que las coaliciones serán imprescindibles para gobernar las principales instituciones de la comunidad autónoma. Además, confirma el empuje de EH y del PP, y el estancamiento, con tendencia a la baja, de PNV y EA. El PSE se mantiene en líneas generales, mientras que IU continúa el descenso apuntado en octubre, al igual que Unidad Alavesa, que pierde la mitad de sus junteros y concejales. La batalla de Álava Según los resultados del sondeo, la unión de PNV y EA obtendría 15 o 16 junteros en Alava, seguido por el PP con 13 o 14, el PSE-EE con 9, Euskal Herritarrok con 6 o 7, Unidad Alavesa con 4 o 5 y Izquierda Unida-Ezker Batua con 2 o 3. El PP es la formación que más mejorara su posición respecto a las anteriores elecciones al ganar entre 4 y 5 junteros, mientras que los socialistas incrementarían en dos sus escaños en las Juntas. Sin embargo, y pese a que su unión les garantizaría la victoria, la coalición PNV-EA obtendría 2 o 3 junteros menos que los que lograron por separado hace cuatro años -15 el PNV y 4 EA-. Esta distribución de escaños obligaría a un pacto de al menos de tres fuerzas para conseguir la mayoría que permita el control de la Diputación de Álava. Se da la peculiaridad de que PNV, EA y EH sumarían los mismos junteros que PP y PSE, por lo que estaría en manos de IU y, en mayor medida, de UA, el que la Diputación quede en manos de los no nacionalistas o del bloque de Lizarra. En Vizcaya, la alianza de los partidos de Arzalluz y Garaikoetxea les garantiza la victoria con una suma de entre 20 y 21 junteros -hace cuatro años obtuvieron 21 por separado; 20 el PNV y 1 EA-. También en este caso el PP y EH serían los partidos que experimentan una mayor subida, ya que los populares pasarían de 9 parlamentarios forales a 10 u 11, mientras la plataforma de HB pasaría de 5 a tener entre 7 u 8. El PSE mantendría en este territorio sus 10 junteros, aunque podría perder uno, al igual que IU, que pasa de 4 asientos a 3. La encuesta pronostica la desaparición de Iniciativa Ciudadana Vasca, la plataforma del ex alcalde de Bilbao José María Gorordo, que perdería los dos junteros que obtuvo hace cuatro años. Guipúzcoa sigue siendo el territorio en el que el nacionalismo cobra una mayor ventaja. PNV y EA alcanzarían con claridad el primer puesto en las Juntas, aunque los 19 escaños que pronostica la encuesta en conjunto quedan por debajo de los 22 que ambas formaciones lograron individualmente hace cuatro años -10 de EA y 12 del PNV- . Sin embargo, individualmente, Euskal Herritarrok se situaría en primer lugar, al pasar de los 11 junteros de la anterior legislatura a tener 13 o 14. El PP podría igualar e incluso arrebatar la tercera posición a los socialistas, al conseguir entre 8 y 9 escaños -en la última cita obtuvo 7-, mientras que el PSE-EE lograría 8, uno menos que en el 95. En esta provincia, IU conservaría los dos junteros que tiene en la actualidad. Las capitales La batalla por las capitales de provincia se mantiene dentro los mismos esquemas y tendencia de subida de votos del PP y EH. La principal novedad se produce en Vitoria, donde el nacionalismo moderado perdería el liderazgo que ha mantenido desde la llegada de la democracia con José Ángel Cuerda, aunque en los últimos 12 años teniendo que recurrir a gobiernos de coalición. Según encuesta, en las primeras elecciones sin Cuerda, el vencedor será el PP, con una exigua ventaja de 8 escaños frente a los 7 de la coalición de PNV-EA, que obtedría dos ediles menos que en 1995. El PSE aumentaría su representación al pasar de 4 a 5 concejales; un incremento similar al de EH, que pasa de 2 a tener 3, mientras que UA perdería dos de los 5 concejales que tiene ahora. La suma de concejales favorece un equipo de gobierno no nacionalista. Bilbao es la capital en la que no se pone en cuestión la victoria del nacionalismo, y el único lugar en el que suben, al pasar de 9 escaños a 11. El PP mantendría los 7 concejales actuales o lograría uno más, mientras que el PSE podría alcanzar 5 escaños o conservar los 4 actuales. EH sube de 2 a 3 ediles, IU mantiene los 2 que tiene, mientras que la formación de Gorordo (ICV) bajaría de sus 5 concejales de 1995 a uno, en el mejor de los casos, dos. En San Sebastián la permanencia del socialista Odón Elorza en la alcaldía podría concluir si la coalición EA-PNV gana con 8 concejales, los mismos que lograron por separado en 1995. El PSE pasaría a ser la segunda fuerza con los mismos 7 concejales, el PP obtendría 6 ediles, HB otros 6 -dos más-, e IU podría quedarse sin representación en el Ayuntamiento.