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La BBK alcanzará unos beneficios de 35.000 millones de pesetas a finales de este ejercicio

Berroeta cree que la fusión de las cajas no es imprescindible y que no debe ser una obsesión

"No es imprescindible ni necesaria para la BBK". José Igancio Berroeta, presidente de la Bilbao Bizkaia Kutxa, apuntó así su posición sobre la fusión de las cajas vascas, recogida por el PNV y el PSE en sus programas electorales como objetivo para la nueva legislatura. No obstante, tras opinar que la fusión no deber ser "una obsesión". puntualizó que la decisión corresponde adoptarla a los órganos de gobierno de las cajas, controlados por los partidos, y pidió que, si se aborda, se haga "técnicamente bien", con seriedad y por consenso ". La BBK celebró ayer su asamblea con este telón de fondo y con unos resultados que vuelven a marcar récords. En los primeros nueves meses del año la caja vizcaína ha logrado 23.035 millones de pesetas de beneficio y espera alcanzar a final de año la cifra de los 35.000.

"No he sido nunca reticente o contrario a la fusión", aseguró en una reunión previa con los periodistas Berroeta, que siempre ha llevado el sambenito de ser contrario a la fusión, algo que el rechaza: "Tal vez he usado un lenguaje bilbaíno y me he comido etapas". Berroeta considera que la fusión precisa tres candiciones: "En primer lugar, desde [el punto de vista de] la BBK no es imprescindible. Lo que no quiere decir que no se pueda o deba hacer. En segundo lugar, se tienen que poner de acuerdo quienes tienen que hacerlo, los órganos de gobierno, y no me parece sencillo. Y por último, hay que hacerla técnicamente bien". A partir de estas premisas Berroeta dice que no se cierra a nada, aunque sí pide seriedad y, sobre todo, consenso. Según su criterio, no puede haber una fusión en el sector financiero sin un acuerdo pleno. Si ésto se logra, el presidente de la BBK cree que es perfectamente posible hacer una fusión rápida en cuanto se tome la decisión. Respecto a los plazos, Berroeta no piensa que por el mero hecho de estar incluida en los programas electorales se vaya a llevar adelante en la presente legislatura. En todo caso, y si se toma pronto la decisión, la fusión nunca podría llegar antes del año 2000, ya que primero habría que modificar la ley de Cajas de Ahorro. Más explícito que nunca, Berroeta llegó incluso a manifestar su disconformidad con su homólogo de la Kutxa, Fernando Spagnolo, quien la semana pasada aseguró que uno de los problemas con los que se topaba la fusión era la homologación salarial, ya que los empleados del BBK ganaban un millón más que los de Kutxa o la Caja Vital. Tras poner en duda que Spagnolo lo hubiera afirmado, señaló que podría demostrar que no hay tanta diferencia de salarios y aseguró que en ninguna de las cuatro fusiones en la que ha participado eso había sido un obstáculo. "Si al final se hace la fusión, va a resultar una caja fantástica, porque de tres cajas buenas solo puede salir una buena", concluyó el presidente de la BBK sobre esta cuestión. Salida al exterior La asamblea de la caja conoció ayer de manos de su presidente los buenos resultados de la entidad de ahorro. Los beneficios hasta finales de septiembre han crecido un 27% respecto a los del pasado año, hasta alcanzar los 23.035 millones de pesetas. Una cantidad que se queda corta comparada con los resultados que se esperan a final de año, 35.000 millones de pesetas. Estos se repartirán entre la fundación de autoempleo (5.000 millones), la dotación del fondo de reserva (19.000 millones), obra social, (5.000 millones) y el resto para la Diputación. La buena marcha de la economía hizo aventurar a Berroeta que en 1999 la BBK incrementará sus beneficios entre un 10% y un 15% sobre el resultado real 30.000 millones, ya que cinco mil provienen de reservas de la caja para dotar el fondo de autoempleo. Berroeta aseguró que el desarrollo estratégico de la caja se basa esencialmente en la expansión y en la renovación generacional. La BBK continuará con su salida al exterior de Vizcaya. De hecho, la caja cuenta ya con 41 oficinas fuera de su territorio original, 30 de éstas en Madrid. La expansión, por los riesgos que conlleva -una oficina no es rentable hasta los dos o tres años desde su apertura-, lleva a que la BBK no se plantee la posibilidad de abrir más de cinco sucursales durante el próximo ejercicio. Entre las cifras de la caja destaca también la alta inversión crediticia, 838.774 millones de pesetas, el 99% de los recursos disponibles, de los que la mitad están concentrados en préstamos hipotecarios.

Plusvalías de 30.000 millones

La cartera de inversiones industriales de la BBK no ha crecido, pero se mantiene en una situación boyante. El valor contable de su cartera industrial alcanza los 90.482 millones de pesetas. Sin embargo, considerando las plusvalías latentes se llega a 120.000 millones de pesetas. De éstos la mitad están en inversiones energéticas (Repsol, Iberdrola y Petronor) y en telecomunicaciones (Airtel, Euskaltel y Retevisión). El resto se encuentra repartido entre bancos, esencialmente el BBV, infraestructuras y la industria vasca. "Nuestro objetivo es seguir favoreciendo el desarrollo de nuestro entorno y apostar por la industria vasca", aseguró el presidente de la BBK, José Ignacio Berroeta. Pero, además además de ganar mucho dinero con estas inversiones, la BBK ha continuado con su campaña de colaboración con las universidades. Junto al acuerdo para desarrollar el edificio del Rectorado de la UPV en la zona de Abandoibarra, se han alcanzado acuerdos tanto con la Universidad pública como con la de Deusto para implantar la tarjeta financiera inteligente. En principio sirve para el pago de las matrículas, pero se espera ir aumentando sus funciones. Por otro lado, la inversión en la obra social alcanzó hasta septiembre los 4.854 millones de pesetas, un 23,4% más que el año anterior. Además de las inversiones tradicionales en las escuelas infantiles, los clubes de jubilados, las colonias de Sukarrieta y los centros de promoción de la mujer, destacan este año la residencia Aspaldiko Etxea, que se está desarrollando en colaboración con la Diputación Foral de Vizcaya y Cáritas para la tercera edad, la feria Nagusi-98, también destinada a este colectivo, y la actividad de la Fundación BBK. Esta última patrocina los programas educativos del Museo Guggenheim y del Museo de Bellas Artes de Bilbao, además de las exposiciones en las tres salas de la caja. La asamblea de ayer aprobó inversiones en un centro de día en Portugalete y en un club de jubilados en Zalla.

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