La apertura de la línea 3 del metro acercará al centro de Valencia a un millón de habitantes
La línea 3 del metro de Valencia, que se pondrá en funcionamiento el próximo jueves, supondrá un importante salto para el transporte urbano de la ciudad. El nuevo tramo, que discurre entre la estación de la Alameda y la Avenida del Cid, con un ramal que se desvía hasta la estación de Jesús, atraviesa el corazón comercial y financiero de Valencia. Con la apertura de la nueva línea unos 400.000 habitantes de la ciudad, un millón si se cuenta el área metropolitana por donde discurren los Ferrocarrils de la Generalitat, tienen una boca del metro a menos de 500 metros de su casa.
El consejero de Obras Públicas, José Ramón García Antón, presentó ayer a los medios de comunicación la nueva línea del metro de Valencia, que inaugurarán los Reyes el próximo miércoles. La ejecución de la obra, proyecto de la Administración socialista, ha durado 5 años y ha tenido un coste de 41.000 millones de pesetas. La nueva línea arranca en la estación de Alameda, y cuenta con cuatro nuevas estaciones: Colón, Xàtiva, Àngel Guimerà y Avenida del Cid. Al margen de esta línea, se ha construido una bifurcación desde Colón hasta la estación de Jesús aprovechando lo que era un ramal técnico. El tramo principal de la línea 3 discurre por algunos de los puntos más importantes de la ciudad. La estación de Colón da acceso a una de las zonas comerciales más importantes de la ciudad, mientras que la de Xàtiva permite la conexión con la Estació del Nord de Renfe. En la estación de Àngel Guimerà también se ha establecido una conexión con la línea 1, a través de unos accesos que unen la estación nueva con la que ya lleva varios años en funcionamiento. La estación de la Avenida del Cid está preparada para la ampliación que se está preparando hasta Mislata y que entrará en funcionamiento a finales del próximo año. Por lo que respecta al tramo que une Colón con Jesús, permitirá realizar trayectos hasta Torrent, coincidiendo con la línea 1, que recorre l"Horta Sud. Las nuevas estaciones presentan una estética "futurista", en especial la de la Avenida del Cid. Las paredes están recubiertas por planchas de aluminio y por paneles de colores pastel. Algunas de las estaciones contarán con servicios y comercios en el interior, para tratar de dotar de vida a estos recintos, tal y como ocurre en varias ciudades europeas. En la parada de Xàtiva se instalará una oficina de información del transporte metropolitano. Uno de los aspectos que queda por resolver es la construcción de una boca del metro en el interior de la estación de la Renfe, lo que no ocurrirá hasta que no se defina el futuro del recinto ferroviario. Todas las nuevas estaciones del metro cuentan con importantes medidas de seguridad y con acceso para discapacitados. Tanto García Antón, como el director general de Transportes, Vicente Dómine, destacaron la "revolución" que para el transporte público de Valencia supondrá esta nueva línea del metro. "Ahora Valencia cuenta con un auténtico metro", dijo el consejero. La rapidez y eficacia del servicio, que en horas punta tendrá una frecuencia de 4 minutos, o la versatilidad a la hora de realizar combinaciones con otras líneas fueron algunos de los aspectos que más se valoraron del nuevo trazado. Las previsiones son que con la nueva línea el número de viajeros se multiplique rápidamente, doblándose en el año 2005 con 42 millones de usuarios al año.
