Maria del Mar Raventós se convierte en la presidenta del grupo de cavas y vinos Codorníu

Maria del Mar Raventós Chalbaud será la nueva presidenta del grupo Codorníu a partir de mediados de septiembre, cuando se producirá la próxima reunión del Consejo de Administración. Maria del Mar Raventós relevará a Manuel Raventós Artés, que ha superado la edad que los estatutos de la empresa fijan para los presidentes. Es la primera vez que la firma pionera del cava tiene a una mujer como presidente. Maria del Mar Raventós, junto a su hermana Maria Teresa, controla cerca del 20% del capital de Codorníu, una empresa familiar con el capital muy atomizado.

Maria del Mar Raventós Chalbaud es una de las hijas de Jesús Raventós y accionista principal de este grupo familiar, que se caracteriza por tener un capital muy atomizado entre los 120 familiares accionistas que se derivan de las diversas generaciones dedicadas al cava. Maria del Mar y su hermana controlan el 20% del capital y ahora la presidencia, a la que optaban otras ramas de la numerosa familia Raventós. La nueva presidenta sustituye a Manuel Raventós Artés, quien hace ya dos años que superó los 70 previstos en los estatutos para que los presidentes den el relevo. El cambio porque Manuel Raventós, presidente desde diciembre de 1992, ejercía cargos de representación en el Consejo Regulador del Cava. El acceso de una mujer a la presidencia del grupo de cavas es particularmente significativo habida cuenta del carácter conservador de la familia Raventós. El apego de esta familia de 311 miembros a la tradición del hereu provocó un cisma en 1982, con la separación de Josep Maria Raventós Blanc y su hijo, Manuel Raventós Negra. El cisma se zanjó en 1996 con la recompra de la casa la pairal Can Codorníu, obra del arquitecto Josep Puig i Cadafalch, a la rama familiar escindida. La guerra del cava Codorníu ya tuvo una presidenta. En los años cincuenta, lo fue la senyora Montserrat, esposa de un Raventós que prefirió seguir al frente de la línea ejecutiva, en el trajín de las bodegas de arcos noucentistes. Desde aquella época el presidente del grupo tiene un carácter que no es ejecutivo, sino de influencia y representación de la familia. La influencia de Maria del Mar Raventós en Codorníu fue en aumento con la llamada guerra del cava, que enfrentó a Codorníu con su competidor Freixenet. Otros Raventós, como Magí, Xavier o Antoni también optaban a relevar a Manuel Raventós. Las dos firmas enfrentadas tendrán a finales de año otros presidentes distintos de los que mantuvieron la guerra. Maria del Mar Raventós presidirá Unideco, el órgano de administración y patrimonial de todo el grupo Codorníu, y las sociedades cabecera Raimat y Codorníu, de las que cuelgan las diferentes filiales. Codorníu cerró su ejercicio de 1997 con una cifra de ventas de unos 24.000 millones de pesetas (que supone un incremento del 6%) y unos beneficios netos consolidados de alrededor de 2.000 millones. Los beneficios del anterior ejercicio fueron de 1.539 millones. El cambio en la presidencia se producirá el próximo 21 de septiembre. La dirección general del grupo continuará en manos de Jordi Raventós, hermano del presidente saliente. El grupo Codorníu controla la marca del mismo nombre además de Rondel, Delapierre, Masia Bach, Raimat Codorníu Napa y las riojanas Viña Pomal y Viña Zaco. Codorníu vive una fase de expansión en el mercado español del vino después de consolidar su explotación de Raimat, en Lleida. La primera decisión fue la adquisición mediante OPA (oferta pública de adquisición) amistosa del 79,3% de Bodegas Bilbaínas de Haro (La Rioja) por unos 4.000 millones de pesetas, que incluyen unos 1.200 millones destinados a la modernización de la bodega. El grupo catalán de cavas pretende también adquirir una bodega en la zona de denominación Duero o en Galicia, para lo cual tiene previsto asumir compromisos bancarios por unos 10.000 millones de pesetas. Codorníu celebró el año pasado el 125º aniversario desde que comercializara la primera botella de cava en 1872.