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ESTAMPAS

La doble exposición

Los aficionados sienten, aunque luego no la realicen, curiosidad por las múltiples exposiciones en un sólo negativo. La verdad es que el estatismo de la imagen fija propicia en muchos casos una fantasía añadida a la fotografía, que aún siendo un artilugio, añade una cierta capacidad cinematográfica al plano. En el caso de la fotografía que acompaña a este texto, está muy bién realizada y es muy interesante para entender el dinamismo de la acción de una faena taurina alimentando la curiosidad de cómo se produce el encuentro entre el hombre y el animal. Es fácil de hacer, pero requiere cierta práctica. Hay cámaras pequeñas que tienen una palanquita que, accionandola, sirve para que la bobina de arrastre se bloquee y podamos impresionar una o varias veces el mismo fotograma.Si esta palanca no existiera, siempre se puede rebobinar el negativo y volver a fotografiar sobre el fotograma en el que queremos actuar. Hay que tener en cuenta que al hacer una doble exposición cada una de ellas debería ser la mitad para que la suma de las exposiciones sea la justa y el negativo no salga tostado. La practica crea afición y hay veces que probando descubriremos que en fotografía el fin si que justifica los medios.

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