Los partidos navarros deberán justificar el origen de todo el dinero que gasten en las elecciones
Todos los partidos y coaliciones que concurran a las próximas elecciones al Parlamento de Navarra, que se celebrarán el 13 de junio de 1999, deberán justificar documentalmente hasta la última peseta que gasten en los comicios, así como el origen de todos los fondos que destinen a ese fin, procedan de donde procedan. El Gobierno foral aprobó ayer la modificación de la ley de 1986 que regula las elecciones al Parlamento navarro. El nuevo texto introduce la exigencia legal de transparencia en el origen de la financiación de todos los gastos electorales.
El portavoz del Gabinete de UPN-PP, Santiago Cervera, explicó ayer que la modificación legal, que deberá ser ratificada por el propio Parlamento al regreso de sus vacaciones de verano, pretende ajustar la normativa electoral a las recomendaciones hechas por el órgano fiscalizador de Navarra, la Cámara de Comptos. Este tribunal apreció en su informe sobre la contabilidad de los partidos que concurrieron a las últimas elecciones forales, celebradas en mayo de 1995, una gran abundancia de irregularidades en las cuentas y la ausencia de numerosos justificantes obligatorios de los diversos conceptos de gastos e ingresos, según establece la normativa navarra y la propia Ley Orgánica del Régimen Electoral General de 1985. Esta medida es especialmente significativa en una comunidad que ha resultado tan tocada por los escándalos de corrupción. La nueva legislación autorizará un aumento suplementario de hasta el 25% como máximo de los gastos electorales ordinarios en el caso de que se solapen en una misma jornada dos o más convocatorias electorales. Ello ocurrirá el próximo 13 de junio, día en el que se celebrarán, además de las elecciones al Parlamento de Navarra (y de otras doce comunidades), las municipales y los comicios al Parlamento Europeo. Ello significa que cada partido navarro podrá sumar a los 33,8 millones de pesetas que como máximo puede gastar en la actualidad (en virtud de la actualización legal que se realizó en 1995) un 25% más (cerca de ocho millones y medio) para afrontar la triple cita. "No sólo se limitan esos gastos", explicó Cervera, "sino que se exigirá la justificación del origen de cualquier fondo gastado en la campaña de las elecciones forales, sea procedente de donaciones de personas físicas o jurídicas, o fondos propios procedentes de créditos bancarios o cualquier otro origen". Corregir situaciones La nueva norma busca corregir situaciones anteriores, marcadas por las dificultades para verificar el cierre de cuentas electorales, el origen de los fondos o la vulneración de los requisitos de la legislación mercantil en los justificantes o facturas, incluyendo en este último apartado el incumplimiento por parte de bancos y cajas de ahorros de la comunicación a la Cámara de Comptos de las operaciones de concesión de créditos o de suministro de bienes y servicios por más de un millón de pesetas. El partido gobernante en Navarra, UPN-PP, fue el único que remitió en las últimas elecciones forales toda la documentación exigida por la ley y al mismo tiempo fue la fuerza que más gastó en los comicios, exactamente 30,5 millones de pesetas. El resto de las formaciones parlamentarias (PSN-PSOE, CDN, Izquierda Unida, HB y EA) incurrió en deficiencias documentales en diversos conceptos. Sus gastos fueron inferiores y oscilaron entre los 21 millones de CDN y los 8 de IU, pasando por los 19 millones que emplearon los socialistas, los 15 millones de Herri Batasuna y los 14 de EA. Aunque el Gobierno navarro entiende que debe elevarse, la normativa aprobada ayer no modifica el listón del 3% de los votos válidos emitidos para acceder al Parlamento foral. UPN-PP quiere subir esa barrera al 5% al considerar que "generaría una representación parlamentaria más útil y contribuiría a crear mayorías de gobierno más sólidas". Pero la medida no es apoyada por ninguna otra fuerza de la Cámara lo que ha hecho desistir al Ejecutivo. De entrada, aumentar del 3% al 5% el tope parlamentario podría significar la desaparición de EA del Legislativo. El partido de Carlos Garaikoetxea cuenta con dos escaños en el Parlamento navarro tras haber obtenido en 1995 un 4,62% de los votos.
