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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Viviendas, así no

Mala política es en sí misma, y también por sus consecuencias, la de atacar con leyes o modificaciones de leyes cada vez más duras a los usuarios de viviendas y demás inmuebles en alquiler, lo que conviene recordarlo, ahora que se anuncian nuevas y preocupantes vueltas de tuerca contra ellos, que componen el sector social de menor nivel económico.Ya de suyo, el sistema y las estructuras en las que nos desenvolvemos impelen a tratar de acceder a la propiedad y a ponerse a salvo de los inconvenientes, riesgos, cambios legislativos e incertidumbres que penden sobre el inquilinato. Lo cual se fuerza tanto más cuanto más se legisla contra los alquilados.

¿Por qué cuestan tanto dinero las viviendas...? Porque los ciudadanos están dispuestos a pagar altos precios por tener un hogar propio y no vivir de alquiler. Y, ¿por qué las viviendas son más y más caras cuanto peor son las leves para los inquilinos ... ? Pues, obviamente, por lo mismo. Bien lo hemos visto en España en estos años, con el decreto Boyer. Con otra grave consecuencia: que las Administraciones públicas no den abasto a atender, con el dinero de los contribuyentes, la fuerte demanda de viviendas sociales que generan la especulación, la carestía y el imperio del desahucio en el sector privado.

A éste hay que apoyarle con adecuadas ayudas fiscales, financieras y urbanísticas, pero sin destrozar los derechos de los usuarios, como se está haciendo.

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