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Presión por la religión

Los padres de alumnos de un gran barrio de Madrid (el de Hortaleza) aseguran estar recibiendo presiones desde los colegios para que los niños se inscriban en clase de religión. "El director del centro al que va mi hija no convoca a todos los padres, aborda a uno por uno para intimidarles, así que son pocos los niños que se han quedado fuera de la clase de religión y que, además, quedan desatendidos", cuenta un padre. "Lo peor es que a los que acuden a religión les pasan películas de dibujos. Hay niños como mi hija, de tres años, que ha vuelto a casa llorando para que la metamos en religión". Estos mismos padres creen que el Ministerio de Educación está estimulando de forma desmesurada los conciertos con los colegios privados.

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