_
_
_
_
CONSEJO DE MINISTROS

Aznar repite en la Administración central el modelo que ensayó en la Junta de Castilla y León

Luis R. Aizpeolea

LUIS R. AIZPEOLEA El Gobierno ha eliminado 144 altos cargos de la Administración central, según el decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros. La poda se ha centrado en las direcciones generales, cuya disminución es de 86 (de 206 a 120), y en las asesorías, cuya reducción es de 55 (de 160 a 105). La cifra disminuye en 3 en el caso de los secretarios generales (de 32 a 29). Los secretarios de Estado aumentan de 18 a 19, mientras que los ministros pasan de 15 a 14. El vicepresidente del Gobierno Francisco Álvarez Cascos envió ayer tarde el organigrama a cada ministerio para una última consulta, tras las vicisitudes y baile de cifras de los últimos días. El Gobierno no ha cuantificado el ahorro que supondrá esta reestructuración.

Más información
El trasvase del agua a Medio Ambiente rompe el esquema clásico de Fomento

El Gobierno de Aznar aseguró, en un golpe de efecto, que había reducido en un tercio el número de los altos cargos en atención a su compromiso de austeridad. Aznar está siguiendo la misma pauta de actuación que le guió en el comienzo de su mandato en la Junta de Castilla y León en 1987. Allí inició su andadura con la eliminación de dos consejerías, algunas direcciones generales y, sobre todo, la supresión de los delegados territoriales de la Junta.La supresión de directores generales por ministerios aprobada ayer se reparte así: Economía y Hacienda, 14; Sanidad, 11; Interior, 6; Presidencia, 4; Defensa, 5; Fomento, 10; Trabajo y Asuntos Sociales, 8; Educación y Cultura, 8; Industria y Energía, 3; Agricultura, 5; Administraciones Públicas, 3; Exteriores, 4; Justicia, 3; Medio Ambiente, 2. El decreto limita a siete el número de asesores de los ministros.

Otra cosa son los efectos de la operación en cuanto a ahorro para la Administración. La su presión de 86 directores genera les, la parte más importante de la poda de altos cargos, supone un ahorro inferior a los 300 millones anuales, si se tiene en cuenta que un 80% de los eliminados seguirán en la Administración ya que son funcionarios.

Estos cálculos proceden de José Luis Rodríguez Zapatero, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Administraciones Públicas. El nuevo Gobierno del Partido Popular no ha hecho una cuantificación económica de los recortes, aun que afirma que será superior, habida cuenta de los gastos que acarrea la propia figura del director general (secretaría, chófer ... ).

La exposición de cifras la aplaza el Ejecutivo hasta que proceda a reformar la Administración periférica del Estado, lo que se ha comprometido a efectuar antes del verano. Pero, en todo caso, quedará muy lejos de la pretensión inicial del Gabinete de que afecte sensiblemente a la reducción del déficit público.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Otro rasgo del nuevo modelo de José María Aznar, la macrocefalia de La Moncloa, aparece calcado del ensayado por el nuevo presidente del Gobierno en la Junta de Castilla y León. A, su llegada a la Junta montó un importante aparato de imagen en torno a la Presidencia: multiplicó por dos los medios materiales y humanos; creó una oficina del Portavoz de la Junta; Presidencia centralizó el gasto de publicidad, que, a su vez, multiplicó sus cifras, y centralizó la comunicación del Gobierno.

En el palacio de La Moncloa, José María Aznar ha concentrado dos vicepresidencias, una política y otra económica. Los socialistas sólo tuvieron una vicepresidencia e incluso, tras la dimisión de Narcís Serra hace un año, amortizaron el puesto. También ha concentrado cuatro secretarías de Estado -Comunicación, Relaciones con las Cortes, Jefatura del Gabinete del Presidente y Secretaría General de la Presidencia- frente a dos en la etapa anterior.

Las cifras de la confusión

El PP ha provocado una enorme confusión al fijar la cifra de altos cargos gubernamentales. El 17 de febrero, durante la última campaña electoral, Manuel Núñez, diputado y experto del PP en Adiministración Pública, aseguraba que la Administración tenía 8.458 altos cargos, de los que su partido pretendía suprimir el 72%, esto es, 6.110. El Partido Popular fundamentaba en la inflación de altos cargos, su política de oposición al PSOE en el terreno de la Administración.Esta cifra fue rebatida siempre por los socialistas y por algunos expertos, que señalaban que el portavoz del PP confundía altos cargos con cargos de designación, como abogados del Estado, diplomáticos o ingenieros. La Administración socialista cifró en algo más de 400 el número de altos cargos, entendiendo como tales desde directores generales a secretarios de Estado, esto es, los nombrados por el Consejo de Ministros.

Curiosarnente, el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez, regresó a las cifras que manejaba la Administración socialista al referirse al concepto de altos cargos: 431. Cuando se le interpeló sobre los 6.110, u otras cifras, que se había comprometido a eliminar el Partido Popular en su etapa de oposición respondió que había habido una confusión terminológica.

Una confusión que ha durado muchos años y que se ha aclarado justamente cuando los populares han comprobado en el Gobierno que lo máximo que pueden eliminar son 138 altos cargos, la mayoría funcionarios.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_