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"Zubizarreta lo habría hecho peor, seguro"

Molina celebra con la mayor naturalidad su extraño debú con la selección

Recibió la noticia con toda naturalidad, cumplió la misión con buena nota y hasta se divirtió. De paso, probablemente, Molina se ganó una plaza para la Eurocopa de Inglaterra. Su alucinante debú con la selección española, como jugador de campo y no como portero, ha entrado para siempre en el anecdotario del fútbol español. Al guardameta del Atlético le costará olvidar la experiencia que vivió en Noruega el miércoles por la noche. "Yo me lo pasé bien", insiste.Armado de un vocabulario cargado de tacos y de un sentido del humor de lo más refrescante, José Francisco Molina rememoró ayer su inesperada aventura: "Cada uno tendrá su opinión; pero Clemente le echó dos cojones, y yo, también. Fue una experiencia extraña, pero siempre es bueno jugar con la selección. Me habría gustado debutar como portero... sucedió así y hay que aceptarlo. Tuve un debú feliz. Además, no lo hice mal del todo".

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La anécdota, como casi todo lo que afecta a Clemente, llegó acompañada de cierta polémica (Jesús Gil y algunos medios de comunicación la criticaron duramente). Molina sorteó ayer todos los peros que se le fueron poniendo a la decisión del seleccionador. ¿Le pareció normal? "Siempre es mejor jugar con 11 que con 10". ¿Sí, pero le habría hecho lo mismo a Zubizarreta? "No sé. Lo que sé es que Zubi lo habría hecho peor, seguro". ¿Y si usted se llega a lesionar? "En eso no puedes pensar... También hace cinco años me lesioné en un dedo con una cafetera. Y sin salir de casa". ¿Y no tuvo la tentación de coger el balón con las manos? "No. No ves que no llevaba los guantes puestos".

Lo cierto es que Molina no sólo aceptó el desafío como si nada, con la máxima serenidad, sino que jugó bien y animó un partido que por entonces vivía dormido. Hasta remató a puerta una vez, en la mejor ocasión de España: "Si llega a entrar, la que liamos. Sin entrar ya se monta este jaleo... Yo chuté y, la verdad, vi que no iba mal del todo".

Antes de lo sucedido el miércoles en Oslo, ya se hablaba de Molina como un portero que se manejaba bien con los pies. Pero nadie se esperaba que demostrara tan buenas maneras. "Yo creo que los noruegos", comenta, "no tenían ni idea de que yo era portero". Molina se inició como guardameta a los 12 años, cuando ingresó en la escuela de fútbol Benimar, en Valencia. Desde entonces, su carrera la recorrió siempre bajo los palos. Como aficionado, eso sí, también hace sus pinitos como jugador. de campo: "Es que a mí me gusta jugar al fútbol. En realidad, yo sólo juego de portero cuando me pagan. Cuando juego gratis lo hago de jugador".

Muy lejos de coincidir con la visión crítica del asunto, sus compañeros de plantilla le recibieron entre aclamaciones. El guardameta correspondió al cachondeo: "Ya les he dicho a Fortune y Pirri que lo tienen jodido".

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