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La policía judicial investiga el ingreso de 420 millones en la sociedad de Conde Los Carrizos

La Policía Judicial que investiga las operaciones ligadas al caso Banesto ha descubierto que la sociedad Los Carrizos, de Mario Conde, recibió en la primavera del año pasado -algunos meses después de la intervención de Banesto- 420 millones de pesetas procedentes de Data Transmision Systems. Esta empresa, junto con Gay Cordon, fue utilizada, presuntamente, por Mario Conde y su socio Arturo Romaní para ingresar fondos procedentes de la venta de varias empresas del grupo cementero del banco en beneficio propio. Esta operación está incluida en la querella que instruye el juez Manuel García-Castellón contra el ex presidente y el ex vicepresidente de Banesto.

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La investigación de las operaciones de Conde no deja de dar sorpresas. La descubierta ahora por la Policía Judicial sigue los cánones fijados por Conde y su equipo ya conocidas en otras anteriores. Lo que ésta tiene de particular es que se realizó meses después de que se interviniera Banesto y Conde y su gente fueran destituidos de sus cargos. En concreto, se hizo a lo largo de la primavera de 1994.La operación comienza con el pago por parte de Data Transmision Systems de 420 millones de pesetas en un cheque a la sociedad Servicios y Recursos, una empresa que en su día estaba en la órbita de Oil-Dor (a su vez perteneciente a Banesto e investigada por el juez) y que en la actualidad pertenece a Joaquín Asensio Monsalve.

Jugosa plusvalía

Posteriormente, Servicios y Recursos suscribe una ampliación de capital por valor de esa misma cantidad en Apolo, sociedad que está controlada por Arturo Romaní. El siguiente paso consiste en la compra por parte de Apolo de cuatro chalés propiedad de Lourdes Arroyo, esposa de Mario Conde, en la localidad mallorquina de Pollensa. La adquisición se hace por los citados 420 millones, cuando el valor catastral es de 15 millones de pesetas. Al tiempo, Apolo alquila los chalés a Arroyo.

Lourdes Arroyo, según la investigación, ingresa esa cantidad en la cuenta que tiene con su marido en el Banco Guipuzcoano. Posteriormente, salen fondos en distintas cantidades a la cuenta de Los Carrizos en la entidad Barclays. Los Carrizos es la empresa en la que Conde tiene como principal activo la finca del mismo nombre situada en la provincia de Sevilla.

El descubrimiento de las operaciones realizadas a través de Data Transmision Systems fue una de las causas que llevó al juez de la Audiencia Nacional a determinar la prisión preventiva de Mario Conde y Arturo Romaní.

Data, sociedad cuya finalidad es la prestación de servicios profesionales de asesoría y consultoría", estaba gobernada por Arturo Romaní y Mario Conde a través de Elena García Baquedano, Susana Sánchez Herrero y Alejandro Valcarce von Rein, según consta en la querella interpuesta por la Fiscalía, documento que dio origen a la vertiente jurídica del caso Banesto. Estas personas administraban otras muchas sociedades de las que Romaní posee el 100% de su accionariado u otras participaciones importantes.

Dicha sociedad, constituida en 1990 con un capital social de 10 millones de pesetas, se vio favorecida por una transferencia no justificada de 1.224 millones de pesetas, generando en el primer año de funcionamiento unos beneficios netos antes de impuestos de 1.271 millones de pesetas.

La operación a través de la cual se dio injustificadamente a dicha sociedad esa cantidad de dinero tiene que ver con el proceso de adquisición de Banesto de varias empresas hormigoneras de la cadena Valenciana de Cementos Portland.

En 1990 se escindió el grupo Portland por desavenencias entre los directivos de Banesto y la familia Serratosa. Como consecuencia de ello, a Banesto se le adjudican determinadas sociedades del grupo, entre ellas Prebetong Aragón y Hormifasa, y se acuerda transferir al grupo Banesto el 30%, por importe total de 176 millones de pesetas, que es pagado por Banesto mediante cheques cruzados en favor de los vendedores.

Sin embargo, y a pesar de tal precio de compra -176 millones- en el balance a 31 de diciembre de 1990 de Portland Iberia aparece contabilizado ese 30% del capital de Prebetong Aragón y Hormifasa por un valor de 1.403 millones de pesetas. Esa sobrevaloración permitiría obtener más tarde (ver información adjunta) los 1.224,5 millones que capitalizaron Data Transmision Systems.

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