10.000 empleados de Banesto arrastrarán durante años los créditos concedidos para comprar acciones

Los 7.000 empleados de Banesto que recibieron créditos para comprar acciones del banco y los 3.000 jubilados que se hallan en la misma situación están atrapados por unas deudas que mermarán sus nominas o complementos de pensiones hasta final de 1998 sólo con el pago de los intereses. A partir de entonces, a una gran mayoría les quedará por devolver el principal. La oferta que de forma oficial ha comunicado el banco a sus empleados ha generado discrepancias entre los sindicatos, que habían actuado unidos en todo momento durante el periodo de intervención por parte del Banco de España.

En la nómina de este mes de octubre, todos los empleados con créditos para la compra de acciones tendrán un descuento del 3% en su salarlo bruto a cuenta del pago de intereses de los préstamos que concedió el anterior equipo directivo del banco como "fórmula de integración del personal". La media de crédito por empleado es de tres millones de pesetas, según señalan los sindicatos, y el interés medio al que se concedieron entonces era del 7%. A partir de ahora, se aplicará el 3% nominal.La mayor parte de los créditos se ofrecieron a los empleados en el año 1989, justo después de que se frustara la fusión entre el Banesto y el Central, por las desavenencias en el consejo de Banesto y la dura pugna que enfrentaba a Mario Conde con Los Albertos. Las acciones procedían tanto de la elevada autocartera del banco como del paquete de acciones de Juan Abelló, cuando éste decidió abandonar el consejo y el capital de Banesto.

4.900 pesetas la acción

En el momento de ofrecerse a los empleados las acciones de Banesto, éstas cotizaban a 4.900 pesetas. En la actualidad, esas acciones no superan las 800 pesetas. El capital en manos de los empleados se acerca al 9%, tal y como informaron los sindicatos. Los empleados sindicaron sus acciones durante el proceso de intervención del banco y eso les permitió firmar un protocolo con el actual presidente Alfredo Sáenz para mantener el empleo y tener una presencia más efectiva en las juntas generales durante el periodo de la intervención. Los créditos para la compra de acciones a empleados del Banesto se han concedido, con diferente intensidad, desde 1981 hasta 1993.El banco, que establece en 7.000 los empleados afectados -no incluye a los 3.000 pensionistas-, ha decidido renovar todos los créditos en vigor hasta diciembre de 1998 y ha establecido unos intereses que considera "beneficiosos para los empleados que los suscribieron en la anterior etapa del banco presidida por Mario Conde". El director de Recursos Humanos de Banesto, Timoteo Patricio, ha enviado una carta a cada titular del crédito en la que les explica que la solución tomada "cumple los criterios de racionalidad y generosidad que la actual situación del banco permite". Según fuentes del banco, los créditos concedidos a los empleados ascienden a 34.398 millones, lo que supone una cantidad relevante, "a la que la nueva dirección tiene que dedicar un tratamiento especial".Los sindicatos de banca mantienen discrepancias sobre la oferta del banco. Mientras para María Jesús Paredes, secretaria general de banca de CC OO, la solución "parece razonable", Jorge Díez, secretario general de banca de UGT, explica que "se podrían haber buscado fórmulas que perjudiquen menos a los empleados". Según María Jesús Paredes, "el banco asume una parte del problema y ha admitido una serie de recomendaciones técnicas propuestas por nosotros. Lo que está claro. es que son créditos que hay que devolver y la fórmula ha sido similar a la que adoptó el BCH con las acciones que vendió a su plantilla". Pero Díez opina que "nadie ha pensado en dejar de devolver los créditos, pero la oferta no persigue una amortización real del capital. Además, las condiciones son muy perjudiciales para los empleados". Díez afirma que UGT es partidaria de que el banco conceda una quita.