Una juez vasca avala el uso del vídeo para vigilar manifestaciones
Una sentencia de una juez de San Sebastián ha dado carta de naturaleza legal a la grabación por la Ertzaintza de disturbios y altercados callejeros, al conceder a un vídeo de la Policía Autónoma vasca "innegable valor probatorio". Gracias a la grabación, realizada en agosto del año pasado en los incidentes durante la procesión de La Salve donostiarra, la juez Carmen Zubimendi ha condenado a penas de un año a 18 meses de prisión a tres personas por graves desórdenes.La juez defiende en su resolución el uso "de toda clase de medios que permitan constatar la realidad sospechada" y especifica que la vigilancia se puede "desarrollar en la vía pública, concretándose en tareas de seguimiento o visualización", aunque impone la limitación del respeto a la intimidad. Éste es el segundo fruto que da la costumbre que ha adquirido la Ertzaintza de filmarlo todo ante la eventualidad de que se produzcan actos delictivos. Anteriormente había conseguido desarticular la red de ETA dedicada al cobro del impuesto revolucionario.
Para curarse en salud, los grupos juveniles próximos a ETA están haciendo circular en Euskadi un folleto con consejos para evitar la identificación mediante las cámaras de vídeo, incluso las de control del tráfico rodado, o por la impresión de las huellas digitales en los cócteles molotov (botellas incendiarias). El folleto advierte: "Ojo con las cámaras, también las de tráfico.. Aunque no las veas, no quiere decir que no las alla (sic). Cuando vayas a hacer una movida, tápate la cara, cambia tu aspecto, ropa, etcétera
Otro vídeo, grabado en esta ocasión por un aficionado, puede ser decisivo en otro juicio. El próximo mes de diciembre serán juzgadas en Bilbao 19 personas, acusadas de propinar una brutal paliza a un agente de la Ertzaintza en las fiestas de Bilbao del año pasado. Todas fueron identificadas y posteriormente detenidas gracias a la filmación.
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