_
_
_
_

Los boniteros acusan a otro barco francés de usar redes ilegales

La guerra del bonito continúa. A primera hora de la mañana de ayer, los pescadores españoles avisaron a la patrullera Chilreu, el buque de la Armada española que acompaña a la flota bonitera, de que un pesquero francés faenaba con redes ilegales (superiores a los 2,5 kilómetros reglamentarios) a unos 400 kilómetros al noroeste de las costas gallegas, según declaró el presidente de la cofradía de Hondarribia, Esteban Olaizola. El Chilreu se lo comunicó a la patrullera francesa para que fuera al lugar de los hechos y comprobara la infracción, pero, según Olaizola, a media tarde todavía no había aparecido.Éste es el primer barco francés con volantas ilegales que la flota del Cantábrico se encuentra desde que regresó a la mar, hace una semana, para probar el nuevo acuerdo pesquero alcanzado entre Francia y España. El acuerdo intensificaba la vigilancia para evitar estas infracciones.

Mientras tanto, el Rainbow Warrior, buque insignia de Greenpeace, siguió inspeccionando los pesqueros franceses que faenan por el Golfo de Viz aya, a pesar del ataque de dos navíos de la Armada francesa que sufrieron el pasado sábado. A lo largo del día de ayer no se reprodujeron los incidentes, aunque los buques militares franceses, e incluso un avión, vigilaron estrechamente todos los movimientos de la embarcación ecologista. Hoy se celebrará en Bermeo una manifestación en apoyo de los boniteros.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_