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La exaltación de Induráin

Hinault y Merckx invitan al ciclista español al club de los cinco

Eddy Merckx y Bernard Hinault abrieron ayer de par en par la puerta de su exclusivo club de los cinco a Miguel Induráin. Los dos únicos ciclistas vivos que han ganado cinco veces el Tour (el tercero, Jacques Anquetil murió hace años) coincidieron en sus apreciaciones en la prensa francesa. "El español", declara el belga Merckx al diario Le Parisien, "goza de tal margen de seguridad, inteligencia, fuerza y preparación física que pronto se unirá al club de los, cinco"El francés Bernard Hinault,' que nunca se ha mordido la lengua a la hora de ser crítico con la forma en que Induráin planificaba sus victorias, se ha rendido con armas y bagajes, y a aún más lejos que Merckx. "Induráin debe ganar seis Tours", declaró Hinault en L' Equipe, el diario organizador de la ronda francesa. "Miguel ha corrido muy inteligentemente, mejor que en ediciones anteriores, conoce muy bien el Tour y se ha preparado mejor". "La receta ideal para ganar el Tour", prosigue el pentacampeón bretón, "es la de Induráin, quien corre dosificando cada esfuerzo, calculando cada segundo ganado y pensando en las consecuencias para el día siguiente".'Corazón de Terrninator'

LÉquipe destaca en su amplia crónica sobre el Tour que "lnduráin ha igualado a Merckx y Anquetil ganando cuatro Tours de forma consecutiva", pero no se queda en esa constatación, sino que aventura un largo reinado para el ciclista español. '1nduráiwserá el primer ciclista en ganar cinco Tours consecutivos, tanto más cuanto el campeón español es un perfecto atleta, inasequible para los' demás", aventura el rotativo deportivo francés. "Además, esta cuarta victoria es una de las más convincentes, sobre todo porque estuvo mejor que nunca en las etapas de montaña y ha supuesto un mentís categórico a cuantos hablaban de su decadencia".

Y luego, la pregunta más repetida en los últimos años por el mundo ciclista. "¿Quién podría impedir a Induráin ganar un quinto Tour?", que titula L'Humanité. "Al vencer con mayor facilidad que nunca su cuarto Tour", comenta el diario francés, "ha alcanzado a Anquetil y Merckx, y ha hecho acallar los rumores que anunciaban su decadencia. El corredor navarro es el favorito número uno de la edición de l995".

France Soir destaca que Induráin "marca una época, como Coppi, Merckx Anquetil e Hinault lo hicieron antes que él. Sus victorias imponen respeto". Ese mismo sentir transmite la crónica de Libération: "Al decir de algunos, seis etapas de montaña, cinco llegadas en alto y una cronoescalada deberían haber hecho que el Tour 94 pusiera de rodillas a Induráin. Pero se equivocaron, sobre todo a partir de la contrarreloj de 64 kilómetros, donde fue precisamente Induráin quien puso de rodillas a los demás".

La prensa de Italia exalta el póker de Induráin y su capacidad para dirigir la carrera, sin olvidarse de su nuevo héroe, el diablillo Marco Pantani. "París exalta a Induráin y adopta a Pantani", titula en, portada Il corriere déllo sport, quien en su interior encabeza su crónica con la frase: "Induráin, corazón de Terminator", y en antetítulo le trata de "campeonísimo": "histórico récord para el español que ha mostrado un rostro inédito". "A los 30 años, Michelone está en la plenitud de su madurez", prosigue el diario milanés "No es ya exclusivamente un calculador, ahora sabe dirigir una carrera como lograba hacerlo sólo Meckx".

La gazzetta dello sport titula a toda página: "París corona a Induráin IV", pero destaca que "el afecto va a Pantani, un ciclista que llevó a Italia sobre el podio y salvó la segunda parte del Tour del aburrimiento tras el superpoder de Induráin en la cronometrada de Bergerae

Según La gazzetta, "Induráin tuvo todo el mérito del mundo. Tras la empresa de Bergerac destrozó a Rominger subiendo a Hautacam y cedió algo en los Alpes a Ugrumov y Pantani, pero la ventaja era tal como para no haber corrido riesgos por ello".

Cyrille Guimard, director del Castorama y otro de los hombres reacios a reconocer los méritos del español, también hace de tripas corazón. "A los 30 años está: en la cima de su arte", señala. "Físicamente ha alcanzado su techo, pero en los otros aspectos, como puede ser en el dominio de la carrera o en resistencia nerviosa no hay límite de edad". Como resume Hinault: "De aquí a un año pueden pasar muchas cosas, pero Induráin lo tiene todo de su parte para ganar el Tour por quinta vez, e incluso alguna vez más, lo que sería el Everest".

La senda de Anquetil y LeMond

Induráin necesitó un aprendizaje más largo. Mientras Anquetil, Merckx e Hinault triunfaron en el Tour ya en su debú y necesitaron sólo ocho o siete (Merckx) participaciones para conseguir el pentatriunfo, Induráin ha precisado de 10 intentos para lograr el tetra: seis de calentamiento (incluidos dos abandonos) y cuatro seguidos triunfantes.Pero una vez en el panteón de ilustres del ciclismo mundial, el navarro puede exigir con todo derecho una silla entre Anquetil y LeMond. Sus números se parecen enormemente a los del normando y a los del norteamericano: escasas victorias de etapa Y sólo en los momentos decisivos (en las contrarreloj sobre todo) y una medía cercana a los 10 días de maillot amarillo por triunfo conseguido. Otra similitud: ninguno de los tres consiguió nunca un premio accesorio, . ni montaña ni puntos. Su único objetivo era el Tour, el triunfo final, y nunca se dispersaron como Hinault o Merckx, voraces depredadores de cuanto veían moverse. Induráin, muchas veces criticado por su falta de ambición a la hora de hacerse con triunfos parciales y su escasa predisposición hacia las aventuras épicas, no ha Regado a los ex-tremos alcanzados por LeMond; que ganó su último Tour, en 1990, sin ganar ni una etapa. Aun así, no deja de reconocer el ejemplo del estadounidense, el hombre que mejor supo aplicar la regla de oro de la economía: "lograr el máximo rendimiento con el mínimo gasto

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