Condenado un médico de Barakaldo a indenmizar con 207 millones a una niña a la que dejó oligofrénica por un enema
EVA LARRAURIUn médico del hospital de Cruces, en Barakaldo, Vizcaya, ha sido condenado a indemnizar con 207 millones de pesetas a una niña que sufre una oligofrenia a causa de un enema que le fue aplicado en 1983. La sentencia considera al cirujano responsable del tratamiento culpable de una falta simple de imprudencia y declara al Servicio Vasco de Salud- Osakidetza responsable civil subsidiario de las cantidades que deberá abonar por la incapacidad y daños morales causados y los gastos asistenciales que genere.
El abogado de Osakidetza anunció ayer que recurrirá la decisión judicial por disconformidad con el fondo de la sentencia y la cuantía de la indemnización.
La paciente, de siete meses de edad, ingresó en el servicio de urgencias del hospital de Cruces en noviembre de 1983, donde se le diagnosticó una oclusión intestinal debida a una patología congénita que ya había sido detectada en el momento de su nacimiento. El médico que atendió a la niña no consultó su historial clínico porque el archivo estaba cerrado, y ordenó un tratamiento que incluyó la aplicación de una lavativa. Hora y media más tarde la paciente fue ingresada con un cuadro de intoxicación aguda por fosfatos, "derivado de una absorción excesiva del enema". A consecuencia de esta complicación, la niña sufre "una minusvalía orgánico-funcional del 95%, de carácter permanente e irreversible". Según la sentencia, el médico "no extremó las precauciones propias del caso" que debían haber contemplado las malformaciones congénitas de la paciente.
El fallo establece el pago de una indemnización a la niña de 37 millones de pesetas en concepto de incapacidad y daño moral, y de 30 millones a los padres de la niña por los cuidados que le deberán prestar. Estas cantidades se completan con la constitución de un fondo patrimonial de 140 millones de pesetas, que devengará una pensión anual vitalicia de 3.500.000 pesetas para hacer frente a gastos asistenciales. Osakidetza será titular y responsable de gestionar el fondo.
El consejero de Sanidad del Gobierno vasco, el peneuvista lñaki Azkuna, señaló ayer que la sentencia es excesiva "para un médico que puso los medios que consideró necesarios" al atender a la paciente. Azkuna consideró la actuación médica que causó la lesión "correcta", y subrayó que los medicamentos son siempre potencialmente peligrosos. "Hay que tratarlos con cuidado, porque de vez en cuando pasan estas cosas", añadió. El máximo responsable de la sanidad pública vasca advirtió que extremar la cautela asistencial puede establecer "una medicina defensiva".
