_
_
_
_
_
EXTREMISMO ISLÁMICO

La policía rescata en Argel a los tres funcionarios de la Embajada francesa secuestrados por los integristas

La policía logró liberar el sábado pasado a los tres funcionarios del Consulado General de Francia en Argel secuestrados por un comando integrista hace una semana. Es la primera vez que se consigue en Argelia rescatar a rehenes extranjeros secuestrados, ya que todas las operaciones terroristas similares efectuadas con anterioridad han finalizado con la muerte de las víctimas. En poco más de un mes, siete extranjeros han sido asesinados por comandos integristas.

Los dos funcionarios del Consulado General de Francia en Argel, Jean-Claude Thévenot y Alain Freissier, secuestrados el pasado domingo 24 de octubre, cuando abandonaban su domicilio en pleno centro de la capital argelina, fueron rescatados por las fuerzas de seguridad argelinas en el transcurso de una operación policial efectuada el sábado 30 de octubre. Horas después de hacerse pública la liberación del primer grupo de rehenes, los secuestradores dejaban en libertad al tercer rehén, Michéle Thévenot, esposa de Thévenot, abandonándola en el centro de la ciudad, no muy lejos de la Embajada francesa. Desde un teléfono público la mujer llamó a la embajada y fue el propio responsable de la delegación diplomática quien partió en su vehículo para recogerla.La operación policial, que culminó con la puesta en libertad de los dos hombres, se había iniciado a última hora de la tarde del sábado 30 de octubre, en pleno centro de Argel, cuando se descubrió en el interior, de una pequeña mezquita, situada entre el barrio de Telemly y el de Climas de France, la presencia de dos de los rehenes, así como un contingente de intregristas armados que les custodiaban.

Ante el acoso de las fuerzas de seguridad los islamistas radicales iniciaron la huida hacia la localidad de Oued Slama, cerca de Larbaa, en los límites del Gran Argel, a unos 30 kilómetros del centro de la capital, en un intento de alcanzar los montes cercanos del Atlas de Blida, donde seguramente confiaban encontrar refugio y apoyo entre el maquis.

Pero antes de que lograran su propósito las fuerzas policiales lograron abatir al menos a cinco de ellos. En un momento no determinado de esta operación la policía logró liberar a los dos funcionarios franceses, según se asegura en círculos diplomáticos.

La noticia del rescate de los dos primeros funcionarios fue hábilmente utilizada por las fuerzas de seguridad para presionar psicológicamente a los integristas y lograr la liberación del tercer rehén, en poder de un segundo grupo de secuestradores, según aseguran los especialistas de temas de seguridad de algunas delegaciones extranjeras en Argelia.

Lacónico comunicado

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Ayer al mediodía, unas doce horas después de iniciada la primera operación de rescate, un locutor de la televisión estatal argelina interrumpía el telediario para leer un lacónico comunicado del Gobierno en el que anunciaba la puesta en libertad de los dos primeros detenidos. Minutos más tarde la misma nota era difundida por la agencia oficial de prensa APS. Los responsables de los cuerpos de seguridad, la Admi-nistración argelina y la Embajada de Francia se encerraron a partir de ese instante en un hermético silencio y no facilitaron ningún detalle suplementario.

Horas antes de la liberación de los funcionarios se había distribuido en Argel un comunicado firmado por un denominado Grupo Armado Islamico, que anunciaba la puesta en libertad de los tres rehenes para hoy, 1 de noviembre, coincidiendo con la jornada de fiesta nacional en la que se conmemora el inicio de la guerra de liberación contra el colonialismo francés en 1954. El hecho de que el comunicado esté redactado en francés, en lugar del árabe utilizado por los integristas en sus comunicados, así como el que se hable de la festividad del Primero de Noviembre en términos grandilocuentes, ha provocado las suspicacias sobre la veracidad del escrito.

Estas confusiones y la falta de información con respecto al secuestro han abiertos muchos interrogantes. Algunos de estas preguntas se refieren directamente a las circunstancias en que se produjo el hecho, pero otras están vinculadas al futuro político de Argelia y sobre todo al proceso de diálogo nacional, que trata de sacar al país de la crisis en que se encuentra.

El secuestro de los tres funcionarios y la supuesta implicación de los integristas en la operación ha colocado a la comisión encargada de establecer este diálogo ante un dilema, ya que debe decidir si sienta en la mesa de las negociaciones a los representantes del Frente Islámico de Salvación, el principal partido fundamentalista del país, tal y como lo solicitan las fuerzas de la oposición democrática, que se agrupan en torno a un frente reconciliador.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_