Tensa espera
Los mercados de valores conseguían ayer cierta apariencia de tranquilidad tras frenar el movimiento de caída inicial que se podía esperar por la inercia de la sesión anterior; una inercia debida a la fuerte caída de Wall Street. Ese primer movimiento vendedor se llevó por delante algo más de dos puntos, lo cual situaba al índice general por debajo de la directriz alcista de corto plazo y, consecuentemente, en un terreno demasiado resbaladizo en cuanto se refiere al análisis chartista.El volumen negociado en esta sesión ha sobrepasado los 11.000 millones de pesetas efectivas, una cifra muy baja y que pierde importancia. si se le resta algo más del 50%, cuota que ayer conseguía entre cinco valores. Esta inactividad parece indicar que los inversores están dejando de participar en un mercado obligado a una decisión difícil en la que el ambiente económico tiene un peso considerable.
La apertura de la Bolsa de Nueva York, totalmente indefinida, favoreció el trabajo de los cuidadores al cierre de esta jornada, una actitud llena de buenas intenciones pero que pone al mercado en una situación aún más complicada.
El índice terminó perdiendo un 0,41%, 95 centésimas, mientras que el subyacente de opciones y futuros, el Ibex 35, bajaba un 0,58%.