La inmobiliaria municipal
"Ya no hay ninguna diferencia entre Pryconsa y la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV) porque el Ayuntamiento se ha convertido en una inmobiliaria", comentó ayer el concejal socialista José María de la Riva. Según el PSOE, la EMV se ha olvidado de su fin social y ha incrementado los programas de vivienda dirigidos a las capas medias de la población en detrimento de las más bajas. "El PP sólo mira la capacidad de pago de las personas y no su necesidad de vivienda", aseguró De la Riva.La Gerencia Municipal de Urbanismo ha previsto vivir el próximo año con los ingresos que le proporcione la venta de suelo para viviendas de precio tasado, dirigidas a familias que ingresen entre 253.000 y 428.000 pesetas al mes. Por este concepto, la Gerencia tiene previsto ingresar 13.600 millones, el 55% del dinero que manejará el próximo año. Para conseguir esa cifra, el Ayunta miento necesita poner suelo en el mercado para unas 5.000 vi viendas, calcula el concejal de Obras, Enrique Villoria.
Villoria asegura que este suelo saldrá del desarrollo de zonas cuya urbanización ya estaba prevista en el Plan General. Por ejemplo, las áreas conocidas como El Disco (Aravaca), Los Coronales (Barajas) -cuyo plan fue aprobado en el pleno de ayer-, Las Rosas (Vicálvaro) y El Vandel (Moratalaz).
De la Riva teme que los ingresos que precisa la Gerencia de Urbanismo hagan que se reduzcan las promociones dedicadas a las familias más humildes. "El PP sólo quiere sacar dinero del suelo que va consiguiendo. De hecho, un terreno que han obtenido en la zona del Arroyo del Santo (Barajas) lo van a vender para obtener 6.000 millones de pesetas", comentó.
'Pasillo verde'
Los problemas económicos también motivaron el cambio de concepción del pasillo verde, la obra de soterramiento de la línea férrea entre Príncipe Pío y Atocha. La falta de demanda por los terrenos para comercio y oficinas ha llevado al Ayuntamiento a permutar los suelos previstos para uso terciario por zonas para viviendas. De esta manera, el proyecto prescinde de la mitad de las oficinas previstas y duplica el número de pisos.
Este cambio fue aprobado en el pleno de ayer con los votos del PP y de IU. El PSOE votó en contra al entender que gran parte de las nuevas viviendas debían ser protegidas.
