La policía detiene a 40 activistas islámicos en Argel
Más de 40 activistas islámicos han sido detenidos por el Ejército y la Gendarmería en las últimas horas en las poblaciones limítrofes del Gran Argel, dentro de una operación de limpieza que tiene como objetivo primordial impedir el acceso a la ciudad de la guerrilla integrista. La ofensiva de seguridad pasó ayer sin sobresaltos en la capital, que vivió un viernes festivo, tranquilo y soleado, a pesar de la visible presencia de policías armados con fusiles de asalto en algunas encrucijadas de la ciudad. Entretanto, policías de las unidades antidisturbios patrullaban el centro de la capital.
La operación policial, que causó un herido de bala por resistirse a la detención, parece tener como epicentro en estas últimas horas la localidad de Bumerdés, situada a medio centenar de kilómetros al este de Argel. Esta ciudad, que sirvió de refugio al Gobierno general francés al final de la guerra de la independencia en 1961-1962 ocupa un lugar estratégico entre la capital, la gran planicie de Mitiya y la Kabilia, donde se ha venido moviendo con relativa facilidad la guerrilla integrista.Pero la ciudad de Bumerdés es también en sí misma un núcleo destacado del activismo islámico, que en los últimos años se ha ido constituyendo en torno a importantes organismos nacionales radicados en esta localidad, como son el Instituto Argelino del Petróleo o el Instituto de las Industrias Ligeras.
Entre los detenidos de Bumerdés se encuentran destacados militantes del Frente Islámico de Salvación (FIS), ilegalizado en marzo, y responsables del aparato de propaganda de la organización integrista en poder de los que se ha localizado material de imprenta, según asegura una nota de la gendarmería difundida ayer por la agencia de prensa oficial APS.
En la ciudad de Tlemcen próxima a la frontera marroquí, las fuerzas de seguridad detuvieron a 10 personas sospechosas de estar organizando colectas para el FIS. Con estos arrestos se elevan a 250 las personas capturadas en las pasadas dos semanas en el intento policial de silenciar definitiva mente al FIS.
El frente integrista tiene, a parecer, serias dificultades para hacer llegar sus octavillas o su prensa clandestina a Argel como lo demuestra el hecho de que no se haya distribuido en las dos últimas semanas ningún ejemplar del boletín informativo El Minbar Yumua (Púlpito del Viernes), que venía recibiéndose en las delegaciones de prensa extranjera y en las redacciones de los periódicos de forma anónima, pero con absoluta regularidad e impunidad.
Organización en el exilio
Esta prensa clandestina confeccionada en Argelia por el FIS ha sido sustituida por la hoja titulada Criter (Criterio), distribuida por correo desde Francia, editada por la organización islámica en el exilio y con una tirada que oscila entre los 10.000 y los 15.000 ejemplares. Esta sustitución del Púlpito del Viernes por el Criterio, editado en Francia, obedece a unas dificultades provocadas por las operaciones policiales, pero también es el fruto de una polémica interna surgida en el seno de la organización que enfrenta al aparato exterior, encabezado por Rebah Kevir, con el interior coordinado por Abderrazak Reyam.
El aparato exterior del FIS, asentado esencialmente en Francia, Alemania y Estados Unidos, pretende impulsar una operación de prestigio político, desmarcándose, sin llegar a condenarlas, de determinadas operaciones terroristas efectuadas en los últimos meses por la guerrilla integrista en el interior, actuaciones que han provocado la repulsa de la población y el descrédito de la organización. Estas críticas apuntan a un intento de diálogo con las autoridades argelinas.
Pero nada de esto parece afectar al Alto Comité de Estado y a los responsables del Ejército y las Fuerzas de Seguridad, que, en los últimos días, se han reafirmado en la intención de acabar con el fenómeno integrista con todos los medios, pero especialmente impulsando importantes operaciones policiales en diversos puntos de la República.
